Tarta de queso y boniato asado. Sweet potato cheesecake
El otoño trae atardeceres prematuros, fríos tempranos y vientos que te asaltan de manera imprevista.
Nos regala colores ocres y caída de hojas.
El otoño huele a frío, a humo de chimenea y a boniatos asados.
Hablar del otoño y pensar en las tardes grises y cortas perfumadas por los primeros humos de las chimeneas encendidas es todo uno.
En realidad suena más bonito de lo que es, porque hay chimeneas y chimeneas y en más de una ocasión he llegado a casa con la ropa y el pelo apestando a humo, del que no debería esparcirse por la calle si tuviera la salida según las ordenanzas, pero eso es tema para otra ocasión.
Cuando llega el otoño me acuerdo de los boniatos (que en casa siempre se les ha llamado batatas) en casa de mi abuela. Ella los preparaba de una manera sencilla, cocidos y espolvoreados con azúcar y canela tal y como os enseñaba hace unos años en esta receta.
Entonces, y hasta muchos años después en realidad, yo los miraba con recelo y escepticismo, como tomándonos la medida la una a los otros.
¿Quién me iba a decir a mí que iba a ser necesario un embarazo para que de repente se me antojaran boniatos en el supermercado?
Recuerdo perfectamente aquel día. Mi madre me miraba ojiplática. No cabía en sí de sorpresa viéndome coger boniatos cuando le había hecho todos los ascos posibles a lo largo de mi vida.
A partir de ese momento ha surgido una bonita relación y espero su llegada cada otoño con ilusión y con ganas renovadas de seguir usándolos en mis postres.
Después de preparar con ellos crema, tarta, muffins, brownie, bizcocho... hoy le llega el turno a esta maravillosa tarta de queso ¡no me puedo explicar cómo he tardado tanto en prepararla!
Con lo que me gustan las tartas de queso intento colar casi cualquier ingrediente para hornear una.
Hace pocos días colé unos boniatos en mi cesta de la compra, los horneé y los congelé una vez se enfriaron hasta saber qué preparar con ellos.
Lo cierto es que tenía en mente estrenar un molde pero a la vez dar salida a un paquete de galletas de chocolate que llevaba mucho en el armario y a un resto de galletas Oreo pulverizadas, que usé para otra receta, pero como me pareció demasiada cantidad de galleta reservé una parte y ahí seguían.
Y cuando me puse a cocinar hice todo lo contrario de lo que tenía en mente, usé lo que tenía en el frigorífico e improvisé sobre la marcha.
A estas alturas no es ningún misterio que hacer una tarta de queso sea apostar sobre seguro.
Hacía tiempo que me apetecía probar la combinación boniato & chocolate y he comenzado de manera sutil (cosa poco habitual en mí dado mi amor incondicional por el chocolate)
Ha resultado ser una combinación triunfadora, así que tendré que apostar por ella en más ocasiones y dar salida cuanto antes a los boniatos que me quedan en el congelador.
Aún me maravilla cuando de manera improvisada tirando un poco de aquí y metiendo un poco de allá salen postres tan buenos, tan de temporada y con relativo poco esfuerzo.
Recuerdo la primera tarta de queso que hice en casa. Era una receta de Alma Obregón que vi en un programa que se emitía los domingos en Divinity. Me enamoró y cuando se acercó mi cumpleaños busqué la receta en internet y la preparé la víspera.
Hice mal todo lo que se podía hacer, pero al final salió muy rica de sabor pero más que con la superficie agrietada con el Gran Cañón del Colorado partiéndola.
De esto hace más de seis años y desde entonces han llovido muchas tartas de queso, muchas formas de hornearlas y muchas maneras de preparar la mezcla.
Un millón de veces leyendo y recomendando no batir en exceso para evitar grietas, que es cierto que funciona pero genera cierta ansiedad porque nunca sabes si te estás pasando, y este verano descubro que meter la batidora de brazo es puro milagro.
Se trabaja mil veces menos, no se introduce aire y se tarda un suspiro. Me declaro muy fan de la batidora de brazo para las tartas de queso.
Parece una contradicción a esos consejos que hemos recibido y compartido mil veces pero realmente es una ayuda a la hora de preparar la masa y a la vista tenéis la superficie libre de grietas.
Lo que más me ha gustado de esta tarta de queso es lo cremosa y suave que es.
La textura es una pasada y casi se llega a fundir en la boca.
Fui muy comedida con la canela, no quería enmascararlo todo con su sabor, pero confieso que un poquito más le habría ido de lujo porque al menos yo no la notaba.
Lo dejo caer y ya cada cual que sea más o menos espléndido según los gustos de su hogar.
Y sin darle más vueltas comparto con vosotros la receta de este postre que hará las delicias de cualquier comida otoñal.
¿Alguien se apunta a compartir un buen trozo?
Ingredientes:
Para la base
* Un paquete de galletas de chocolate (tipo Oceanix)
* 80 gramos de mantequilla
Para el relleno:
* 475 gramos de boniato asado
* 600 gramos de queso crema tipo Philadelpia
* 100 gramos de caramelo líquido
* 125 gramos de yogur natural
* 3 huevos
* 1 cucharadita de canela en polvo
* 1 cucharadita de harina
Elaboración:
1. Picamos las galletas hasta dejarlas reducidas a polvo, derretimos la mantequilla y la mezclamos con las galletas.
2. Vertemos en la base del molde desmoldable (el mío de 20 centímetros) que vayamos a utilizar y repartimos por la base, haciendo borde dejándola lo más nivelada posible. Reservamos.
3. Pelamos el boniato asado y lo troceamos. Lo ponemos en un bol amplio o en el vaso de la batidora junto con el resto de ingredientes y batimos hasta obtener una mezcla cremosa y sin grumos.
4. Vertemos la mezcla sobre la base de galleta, alisamos la superficie con una espátula e introducimos en el horno precalentado a 180º C
5. Horneamos durante 60 minutos, apagamos el horno y dejamos con la puerta cerrada 20 minutos más.
6. Entreabrimos la puerta y dejamos 30 minutos más.
7. Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla. Tapamos con film transparente y dejamos en el frigorífico.
Receta sencilla y resultona donde las haya.
Bien es cierto que asar el boniato requiere su tiempo, aunque cada vez con más facilidad se pueden encontrar asados en fruterías.
Yo suelo comprar varios, los aso a la vez y los congelo una vez se han enfriado, envueltos en el mismo papel de aluminio con el que los aso y metidos en bolsas de congelar.
Así aprovecho al máximo el consumo de luz del horno y cuando voy a usarlos en algún postre sólo tengo que acordarme de descongelarlos.
Otra opción es hacerlo en el microondas. Más rápido y económico si sólo asamos uno o dos boniatos para una única receta.
Ya sabéis que llevo un mes de octubre de auténtico infarto y mis entradas son más escuetas que de costumbre y mis visitas por vuestras cocinas prácticamente nulas. Y no me gusta esta situación porque esto es algo recíproco y siento que "falto" a mi parte del pacto.
Gracias por seguir ahí, por pasar y comentar por mi blog a pesar de todos los pesares.
Las peques siguen bien. Este año Lara está especialmente contenta con ir al colegio. Supongo que es una mezcla entre hacerse mayor, su creciente curiosidad y las horas de desidia y aburrimiento a las que nos obligó el confinamiento de principios de año.
Estoy segura de que a pesar de todo lo pequeña que es sabe valorar la vuelta a las aulas a pesar de las circunstancias que estamos viviendo.
Justo antes del puente nos comunicaron que una clase del colegio de Lara había sido confinada porque un alumno había dado positivo. A lo largo del puente confinaron dos clases más en dos colegios diferentes.
No sé si hablar de milagro pero en ninguno de los colegios ha habido contagio alguno a pesar de que eran en clases de alumnos muy pequeños que asisten sin mascarilla al centro.
No es gran consuelo, cualquier día nos toca en nuestra clase, pero te da cierta esperanza ver que igual no va más allá de un susto y un confinamiento de diez días de la niña.
La situación que vivimos es para entrar en pánico. En casa ya acatábamos las medidas de prevención, pero desde principios de mes somos más exahustivos aún si cabe y fuera de las salidas al trabajo y el colegio no pisamos la calle para nada más.
Una amiga me comentaba por teléfono el fin de semana pasado que ella está harta de hacerlo todo bien y estar en riesgo porque los demás "pasan" Cierto que da mucha rabia porque con un poquito de nuestra parte saldríamos mucho antes de esto, pero uno de los riesgos de este juego es que dependes de lo que haga el que tienes al lado y a ver a estas alturas quién confía en los demás si no confiamos casi ni en nosotros mismos.
En fin, más de lo mismo. No nos queda otra que darle tiempo al tiempo.
Me despido, reiterando mi agradecimiento por vuestro apoyo incondicional. Espero que os haya gustado la receta de hoy ¡Nos leemos la semana próxima!
Manos a la masa y ¡bon appétit!
La madre qttj Cuca, Jajajaja..., demasiado bonito y bucólico me pareció tu comienzo para ser real, que aquí también padecemos los terribles ahogamientos por humos de chimeneas, no lo entiendo, todo el día machacándonos con el ecologismo, y en cuanto baja un grado el termómetro, la gente se vuelve tonta quemando leña, bueno lo de leña es un decir, porque a veces huele a palo viejo, a palets y a mueble viejo troceado, Jajajaja...., y la madera de encina brillan por su ausencia, porque claro con el boom inmobiliario, las encinas y olivos son escasas por no decir inexistentes, y claro el que quiere leña de calidad, la tiene que pagar a precio de oro, Jajajaja... Y te lo digo de primera mano, en mi casa la chimenea solo se ha encendido dos veces, una para comprobar que los gorriones habían hecho un nido en el tiro y nos ahumó el salón antes de pintarlo, y la segunda una vez limpio, precintado y desatascado, para comprobar que el tiro funcionaba bien, desde entonces, no está más que para decorar el salón, que echados los números, sale más económico y ecológico, encender el Aire Acondicionado.
ResponderEliminarEn casa de mis padres si la encendemos, llevamos haciéndolo toda la vida, pero con leña de encina que compra mi padre en Extremadura, le traen un camión para todo el año, y se asegura que sea de calidad, porque además de ensuciar menos porque no produce residuos extraños, no da dolor de cabeza.
En fin, mi vida, que con tanta historia, me ha dado ganas de tomar un chocolate calentito, esperando que realmente haga frío para encender la chimenea, mientras tanto, ponme ese trozo de tu riquísimo pastel de queso y boniato, que tiene una pinta fabulosa.
Besitos y cuida mucho de tus princesas.
Ya sabes que soy incondicional de las tartas de queso, yo creo que son las que más gustan, pero también lo soy de los boniatos y unir las dos cosas ha de ser sublime. Una buena idea la de asar una tanda de ellos y congelarlos, nunca los he preparado así, entre otras cosas porque no duran, pero el planteamiento es fetén. Hoy se te ha olvidado enviársela a Marisa para su proyecto de aprovechamiento, me hago cargo del esfuerzo que supone una casa con dos niñas pequeñas y un trabajo, también creo que lo comprenda. Estupendo que todos estéis bien, en los tiempos que corren la salud es inestimable.
ResponderEliminarUn beso.
Hola Cuca!!
ResponderEliminarMe encantan las tartas de queso y esta tuya se ve increíble!!
El truco de la batidora de brazo lo probaré, es algo que no sabía.
Sobre lo boniatos también recuerdo cuando los hacía mi abuela asados y luego los cubría de azúcar. Yo ni los probaba. Pero mi hermana mayor los devoraba. Ahora me gustan, pero como más los utilizo es en recetas saladas.
Las chimeneas creo que todas "perjudican". Todas las casas que tengo alrededor de la mía tienen, y a pesar que están dentro de lo legal, lo noto en suciedad. Mis balcones son de madera en blanco y cuando llega la primavera que hago limpieza pura y dura jeje, son cubos y cubos de agua negra. En fin, de todo no nos podemos quejar.
Besos y ya te vendrán días más tranquilos!!
Pero que tarta mas deliciosa.
ResponderEliminarSaludos.
Oír hablar de boniatos es oler a otoño, es increíble como los alimentos nos hablan y si sabemos escucharlos tan bien como tú lo haces, salen maravillas culinarias como la que nos muestras que se me antoja deliciosa sin lugar a duda.
ResponderEliminarEl corte es magnífico !
Me alegro que todo siga en orden. Hace un rato estaba leyendo que si esto sigue así, preveen cesar la actividad en los colegios . Ya veremos a ver qué pasa .
A seguir cuidándose mucho. Un besín preciosa.
Cuca, mi querida Cuca, hace mucho que no entraba por tu blog ni por el de nadie, me tomé un buen respiro que falta me hacía. Me alegra verte de nuevo y poder disfrutar de tus recetas como esta tarta magnífica y creo que en una frutería de Cádiz los venden ya asados y la verdad es que nunca los he comprado. Me gusta el boniato en recetas saladas cuando hago por ejemplo carne de cerdo al horno y corto grandes las patatas y los boniatos o batata que es como le llamo yo habitualmente.
ResponderEliminarUna buena receta que seguro habrá volado.
De las niñas solo espero que vayan tranquilas y bien. Tiene razón tu amiga, harta de hacer las cosas bien para salir a la calle y tenerle que decir a la gente mayor normalmente que guarden la distancia conmigo que no se me acerquen, antes me daba apuro pero ya lo digo a veces con tono de voz desagradable a ver si se enteran... con lo simpática que suelo ser de natural...ja, ja ja.
En nuestra familia han habido varios casos con hospitalizaciones en UCI, solo hospital o solo confinamientos por casos asintomáticos. Una pesadilla terrible.
Cuidaos mucho y no bajéis la guardia que entre los irresponsables y el bicho lo tenemos claro.
Mil besos y a las niñas unos buenos achuchones. A tu santo mis respetos.
¡Hola Cuca! Pero qué tentación para una loca y ya casi obsesionada de las tartas de queso... la verdad que me tengo que controlar, porque para no parecer cansina, porque estaría publicando tartas de queso... hasta aburrirme yo jajaa... Pues esta te voy a confesar que la tenía en mi cabeza, después de hacer la de calabaza, ya que son de texturas muy parecidas, una vez que están asadas... pero ya es la segunda que la hago... y sigo queriendo probar una tercera, para ver... si nos gusta más, antes de compartirla en el blog. Esta te ha quedado con un corte de infarto... y me comería encantada, ese trocito que enseñas por ahí... a ver si la que me anime a hacer un día de estos... me queda tan buena, como a ti... Un beso.
ResponderEliminar¡¡Hola Cuca!! A mí tampoco me gustaba el boniato cuando era más jovencilla, la verdad es que he empezado a comerlo hace muy pocos años. Por cierto, yo pensaba que "batata" era como le llamaban los latinoamericanos, hasta que tuve el blog y vi que en España había mucha gente que les llamaba así desde siempre. Me pasa igual con la "papa" que pensaba que eran como les llamaban los latinoamericanos a las patatas, pero no, también se le llama así mucho en algunos lugares de aquí. Esto del blog, ayuda mucho, para aprender diferentes definiciones, descubrir nuevos ingredientes, insistir un poco más en los que no nos gusta y descubrir estupendas recetas. Yo he probado la tarta de queso con boniato, una vez que pensaba que tenía calabaza y no, y sí boniato me lancé a ello. Pero no he probado nunca el boniato con chocolate, me pregunto qué tal irá, pero seguro que divino. Y con unas galletas oreo, ¡oh, qué bueno suena eso! Siendo tarta de queso con boniato y oreo, la cosa se pone seria, una tarta para tener muy en cuenta.
ResponderEliminarYo también tengo una receta con boniato para subir, aunque creo que para dentro de tres semanas, pero es salada, en esta ocasión. Tengo gran adelanto de recetas, este sábado empiezo ya con las de diciembre, empiezo con la del Parrandón, sí así de bien voy, pero es que tengo menos tiempo para cocinar y hornear que otras veces y antes de empezar la temporada con el blog hice muchas recetas para ir un poco más tranquila.
Me alegra saber que tus niñas están bien, y que los confinamientos no lleguen a su clase. Hoy hemos tenido una reunión de profesores en el centro que doy clase y a una profesora la han llamado para que saliera a recoger a su hija que habían confinado su clase y lo peor, es que tenía a la otra más mayor, también confinada una semana ya por que su clase la habían confinado también. Tiene que ser un sinvivir estar así con las niñas, y sobre todo, conciliar. Espero que no llegue y puedas hacer por lo menos una marcha normal. Besitos.
Una estupenda tarta :-))
ResponderEliminarPena ya, de tardes de otoño, con menos luz desde este finde :-((((((((((((((((((((
1 saludito
Tengo que probarla, se ve de lujo esa combinacion besitos
ResponderEliminarHola Cuca, qué bien que te guste el boniato, porque yo soy super fan y siempre encuentro algo donde incorporarlo. Tanto el salado como dulce. Tu tarta de queso duce cómeme y con el sabor del boniato asado tiene que ser un plus de sabor espectacular. Me encantan lo que lleva y lo bonita que te ha quedado. Mil gracias por la receta :)
ResponderEliminarBesos.
Me chifla los bonitos. Qué rico toque debe de hacerle dado,besos
ResponderEliminarCuca que tarta tan deliciosa y bonita, buen tip lo de las cuarteaduras, a mi me pasa todo el tiempo con las tartas de queso. Me dio mucha risa tu entrada, por la forma que al fin has llegado a amar el boniato. Te confieso que no soy muy fan de ellos aunque a mi marido le encantan. Pero en chips y en tarta si que me lo comeria y mas si es una cosa tan exquisita como la que nos presentas hoy!
ResponderEliminarBesos
Una riquisima combinación a...queso y boniato 😋las cosas por separado me gustan y juntas nunca las probé🤔 viendo como te a quedado no creo que tarde mucho 😉 nos queda un duro otoño-invierno crudito 🤦♀️ a seguir bien bonita besinos
ResponderEliminarUna tarta deliciosa. Se ve muy jugosa.
ResponderEliminarSaludos
Hola Cuca ! una buena idea la de congelar boniatos una vez asados ,no lo he hecho nunca claro que es que no da tiempo ,mi marido se los ventila en dos días
ResponderEliminarla tarta tiene que estar muy buena ,la pinta que tiene lo dice todo
besitos
Cuca . me encanta el queso y el boniato asi que esta tarta me parece maravillosa , tiene que estar deliciosa
ResponderEliminarbesinos
¡Me encantan los boniatos y la tarta de queso! así que esta propuesta que nos traes hoy me la apunto...
ResponderEliminarGracias por compartirla.
Un abrazo y a cuidarse.
Definitivamente los boniatos no son lo nuestro... sencillamente asados salados pues si, en alguna cremita también pero en los dulces no me acaba de convencer... Y eso que soy una fan incondicional de la calabaza en los postres (por no mencionar calabacín y remolacha jajaja) pero los boniatos no ;o) Gustos y colores...
ResponderEliminarMe alegro que estéis bien dentro de este caso, yo realmente muy harta de cumplir con todo viendo todo el mundo pasar, de los colegios que no comunican los casos, la gente sin mascarilla sentada y bebiendo por los bares en calle, los restaurantes a tope todo el día...
Ya veremos que nos sigue deparando el otoño, que parece mentira que saliendo menos nos falte todavía más tiempo, ¿verdad?
Besos y feliz fin de semana,
Palmira
Pues a mi los boniatos me encanta, y lo que no se es como no los uso más en mis dulces... me los como asados, a cucharadas por eso no me queda nada para usarlos en otra cosa. Me ha encantado esta tarta, te la voy a copiar, porque tengo que probarla!!Un besito.
ResponderEliminarHola, Cuca. Yo soy de las que se siente como tu amiga, pero no voy a entrar en el tema en demasía, porque no voy a aportar nada diferente. Es terrible y supera las fuerzas de muchos. Me acuerdo especialmente de los niños y de los mayores.
ResponderEliminarEn casa los boniatos han formado parte de nuestra tradición y es que en esta tierra, lo que se come mucho en otoño e invierno son los boniatos asados y las calabazas. Aquí son blancos y a los rojos les llamamos batatas.
Tu tarta, con la experiencia que tienes en las de queso, aún la has mejorado ganando tiempo al usar la batidora de brazo. Siempre alegra aprender algo útil.
Espero que vayas mejorando tu estrés y que las niñas sigan estando bien y felices. Que Lara quiera y disfrute en el colegio, dadas las circunstancias es muy bueno y reconforta.
Besos y cuidaos, no tenemos otra.
Pues a mí me pasa lo mismo que te pasaba a ti antes: no soy muy "fan" del boniato.Pero sí lo soy de las tartas de queso, y la tuya tiene una pinta espectacular, ¡qué rico se ve el corte!.
ResponderEliminarAsí que será cuestión de ir animándose a probar a usarlos, además de que el chocolate me gusta mucho, y la combinación con el boniato seguro que está riquísima.
En parte, me pasa como a tu amiga: me da muchísima rabia que muchos estemos haciendo las cosas lo mejor que podemos, sacrificándonos y renunciando a cosas para que después lleguen otros y se junten 146 en una boda, o salgan sin mascarilla, o pasen de todo, en general. Aparte, veo cierto caos organizativo en quienes tendrían que estar centrados, básicamente, en que podamos salir de ésta sanos y con el menor daño económico posible (y no hablo de partidos concretos, sino en general de quienes tienen responsabilidades de gobierno). Pero, en fin, esperemos que poco a poco vayamos mejorando.
Cuidaos mucho, y un beso.
Pero q pinta mas deliciosa
ResponderEliminarTe doy toda la razón Cuca, no tenís que haber tardado tanto en publicar esta delcia. Ainnssss, me encanta el boniato desde siempre y seguro que en una tarta de queso es lo más. Un beso!!!
ResponderEliminarQue buena pinta tiene Cuca :)
ResponderEliminarCon lo que e gusta el boniato y con todo lo que lo como en recetas saladas nunca he probado a hacer ninguna receta dulce con él. Me apunto la idea :)
Me encantan las tartas de queso y la tuya con boniato tiene que ser muy especial con eses sabor que le da asado al horno, un pecado, reconozco que me tengo contener.
ResponderEliminarSeguiremos animándonos ante este bicho que no nos deja vivir (lloro).
besitoss guapa
Cuca que delicia de tarta!!!!, acá fue donde descubrí esa sensación de las chimeneas, este otoño e invierno literalmente ha sido pasarlo desde la ventana, respirar el aire desde un quinto piso que da a una zona de arboles maravillosa que hacen parte de los solares de las casas del frente. (Una sin chimenea en pleno invierno y sin calefacción, la cosa es un poco de envidia de la buena con aquellos que las tienen..., luego compramos una calefacción pero tampoco me gusto mucho porque es de esas que secan el aire y quitan el oxígeno a tal punto que terminan perjudicando la salud; solo la utilizábamos a la hora de dormir para calentar los pies). Ahora pasamos a tener aire acondicionado que intalamos hace poco, de esos que son para frío y calor, a ver cómo nos va en el verano (que quizás este año, no vaya a viajar como suelo hacerlo a casa de mis padres, ya veremos.)
ResponderEliminarD tu receta se me hace la boca agua con este aspecto tan cremoso, que bueno poder tener una batidora de brazo a utilizarla y luego de que nos dices que con ella queda todo tan bien, pues a seguir sacándole el jugo. Las batatas por acá se consiguen de diversas clases, naranjas, blancas, moradas, una delicia. Me gusta mucho el aspecto de tu tarta y la dejo en mis listados dorados por realizar, que cosa más cremosa, creo que yo lo que haría seria hacerla en licuadora una de dos, o se agrieta toda o queda por lo menos semejante a la tuya, es verdad que con los años vamos aprendiendo entre todas con la experiencia que dejan tantas y tantas preparaciones.
Soy una ratona, me encanta la combinación de queso y batata (que tampoco he realizado, ...es ver tu tarta, para provocarme y dejarme con un antojo brutal..., me antojo de todo y quisiera hacerlas todas, pero la panza y el tiempo no me dejan..., pero, la guardaré.). Eso sí, tengo que cambiar la base, acá las oreo no le gustan al señor de las galletas, pero el relleno sí lo llevo todito con su canela incluida te mando un beso grande.
Deseo que todo siga andando de la mejor forma,
un beso para ti y las pequeñas.
Madre mía, es mirar tus recetas y engordar 3 kilos.
ResponderEliminarY es que ahora que como sabes estoy aburrida en casa lo único que me faltaba es ponerle ojitos a esos postres que tú haces.
De verdad te digo que me estoy planteado mandarte un mensajero ida y vuelta, porque esto de solo mirar, tiene que ser malo para la salud jajajaja
En cuanto al colegio y el covid.... Pues como sabes, Nathan y yo estamos en casita en cuarentena, al haber dado negativo los dos, tengo gente que me dice que salga a la calle, porque total.... Somos negativos. A ver señores!!! Que si me hacen quedarme unos días en mi casa por algo será ¿no?.
Además yo estoy súper feliz con mi hijo en casa que cusbdo trabajo, la verdad es que nos vemos muy poco.
Hay que saber mirar el lado bueno de las cosas!!!!!
Muuuuaaaa
Hola Cuca, esta tarta está espectacular, qué cremosa se aprecia en el corte, se ve divina y con chocolate, pues me pido un trozo por favor! He leído las noticias de ese nuevo estado de alarma, la situación es muy preocupante, aquí también, pero la gente anda como si nada está pasando. Hay que cuidarse mucho o más que el primer día. Me alegra que las niñas estén bien y tú también.
ResponderEliminarBesos a las tres!
Te puedes creer que yo no había oído hablar del boniato hasta que entré en el realfooding? Vamos, ni boniato ni batata... Hasta ahí mi incultura culinaria.
ResponderEliminarAhora creo que ya está mucho mas metido en nuestro día a día, llegando a que haya "patatas fritas" de boniato en grandes cadenas como Goiko, Anauco o similares.
Esta tarta de queso se ve deliciosa, cremosidad extrema, y muy fácil de adaptar a mis hábitos alimentarios, así que me la guardo y la haré seguro!!!!!!!!!!!!!!!.
Un besote
esto tiene que estar buenisimo!
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