Pan de muerto. Receta típica mexicana del Día de Muertos.
Este año mi receta de la última semana de Octubre no va dedicada a la fiesta de Halloween ni rescata recetas tradicionales españolas de la festividad de Todos los Santos.
He contado en múltiples ocasiones que en mi zona no hay tradición repostera ni gastronómica en estos días más allá de las gachas dulces o poleás que compartí con vosotros el año pasado y las castañas asadas. Y en el caso de las gachas son más parte de mis recuerdos de la infancia vistas en casa de mi abuela que de la tradición que actualmente vivimos.
Repito en muchas ocasiones que me dan envidia los dulces tradicionales de esta época que muchas de vosotras estáis compartiendo como los panellets, los huesos de santo o los buñuelos (especialmente estos últimos y más si son de calabaza, otros de mis eternos pendientes por llevar a mi cocina)
Pero este año me he liado la manta a la cabeza, he cruzado el charco (virtualmente, que no está la cosa para salir de casa precisamente) y abro mi cocina a una receta tradicional mexicana que se prepara para el Día de Muertos, festividad vinculada a nuestra festividad de Todos los Santos y el Día de los Fieles Difuntos, que se celebra los días 1 y 2 de Noviembre.
Y la culpa la tienen mis hijas. Y Luli Pampín. Y la canción Día de Muertos.
Lo más probable es que no conozcáis a Luli Pampín. Si no fuera por las niñas y por Youtube yo tampoco.
La cuestión es que esta mujer, a ritmo de canciones pelín machaconas cuando las has oído veinte pares de veces, enseña a los niños las vocales, los números, las formas, normas básicas de higiene, los nombres de las frutas y hasta las tradiciones de Halloween o del Día de Muertos. Es bastante completa y bastante internacional, todo hay que decirlo.
En el vídeo Día de Muertos aparecen los altares mexicanos, los papelitos naranjas típicos de esta fiesta y el Pan de muertos.
Lara que es muy curiosa lo pregunta todo y le prometí que un día íbamos a hacer Pan de Muerto, así que no me quedó más remedio que ponerme manos a la masa y llevar a la mesa el pan prometido.
Pero como mi hija es rara a rabiar para la comida no sé si pensó que el pan llevaba muertos en la miga o si al comerlo se convertía en muerto, que la cuestión es que lo miraba como si de veneno se tratara y no consintió probarlo.
Todo lo contrario a Elena que bien se puso las botas más de un día con él. Y los demás también. Todo hay que decirlo.
No voy a entrar en relatar cómo se celebra este día en México. En internet hay mucha información, que será más veraz y estará mejor explicada de lo que yo pueda hacer desde mi modesta verborrea.
Sólo quiero destacar el carácter colorido y festivo de esta celebración, el significado de todos y cada uno de los elementos que se usan en los altares y las ofrendas y lo primoroso del detalle de todos los objetos.
Es bastante contrapuesto a la celebración de Todos los Santos que recuerdo de pequeña. En mi memoria son "oscuros" y tristes los recuerdos en torno a esta festividad. Como algo muy solemne y muy serio, como si visitar las tumbas supusiera un incremento del dolor de la pérdida de un ser querido.
Son percepciones que forman parte de mi subconsciente, complicadas de plasmar con palabras, pero que explican lo curiosa que me resulta esta manera de celebrar una festividad similar (o que tiene un origen derivado de la nuestra)
Lo cierto es que la canción de Luli fue una excusa para adelantar en mi infinita lista de pendientes una receta a la que le tengo ganas desde los inicios del blog.
Ya sabéis que todos tenemos por ahí recetas que nos llaman la atención pero que sin motivo aparente nunca llevamos a nuestras cocinas. Pues el Pan de muerto era una de ellas para mí.
Y no es que sea precisamente complicado, pero ya sabéis que las masas requieren su tiempo para levar y no siempre podemos estar pendientes de su voluntad.
Será porque yo las trabajo poco, pero nunca las puedo predecir. A veces las preparo después de la cena para dejarlas levar por la noche con toda tranquilidad y resulta que antes de acostarme ya han duplicado su tamaño.
Otras veces las hago por la mañana y llega media tarde y no hay forma de que leven.
Siempre intento ponerlas en el mismo sitio, que no haya corrientes, que estén calentitas...pero son caprichosas las muy puñeteras.
En esta ocasión me encontré con una masa perezosa que se resistía a levar, y sin embargo el segundo levado fue rápido.
Como ocurre con las recetas tradicionales, en cada casa tienen su versión. Te pones a buscar información y acabas por volverte loco con tantas recetas que parecen iguales pero que cada una tiene sus peculiaridades.
Para hacer esta receta he seguido el paso a paso de Silvia del blog ChupChupChup pero me he basado en la receta de María Lunarillos adaptando un poco los ingredientes a mi criterio según he visto en otras recetas.
El resultado ha sido bastante satisfactorio.
Con la práctica se aprende, y a toro pasado yo os recomendaría hacer un poco más pequeña la bola de arriba lo que hará que se hornee mejor en el centro de la masa y que estéticamente se vea mas estilizado el pan de muerto.
Son detalles que no cambian el sabor ni la textura de la masa, pero no hay que olvidar de que con los ojos también se come.
En mi búsqueda de la receta he visto dos tipos de acabados del pan. Uno bañado en mantequilla y espolvoreado de azúcar, que es como lo presento yo, porque me ha parecido que era la más popular, aunque según zonas también es frecuente encontrarlo horneado bañado en una capa de mantequilla que le confiere un aspecto brillante y quizá bastante más oscuro al salir del horno.
También he visto versiones rellenas de nata montada, al estilo roscón de reyes pero me ha parecido ver ahí demasiada licencia interpretativa de la receta. ¡Ojo! que no digo que no esté bueno así, pero me parece una interpretación bastante personal de la receta además de un añadido innecesario de calorías.
Para mí tal cual está espectacular. Me ha sorprendido que aguante varios días sin ponerse duro. A ver, al día siguiente ya no está tan tierno como recién horneado, pero aguanta bastante bien el tipo en comparación con otras masas que he preparado y que al día siguiente daban mucha pena (que es una forma sutil de decir que estaban duras como piedras)
A mí me ha recordado un poco al Roscón de Reyes. Me pasa con todo lo que lleva agua de azahar. Lo que me ha planteado dudas acerca de si este ingrediente no sería un añadido de este lado del charco. Que probablemente lo será.
Lo que está claro es que nos ha gustado mucho. Las masas tienen un je ne sais quoi que todas me fascinan, y una vez hechas te dices que no es para tanto la receta y que no deberías dejar pasar tanto tiempo entre una masa y otra, pero sinceramente, siempre me da pereza ponerme con ellas precisamente por lo poco predecibles que son como os comentaba al principio de la entrada.
Os animo a que prepareis este pan. Con estas cantidades se pueden hacer dos panes medianos, pero yo voy a lo cómodo y a lo grande y he hecho sólo uno que sinceramente da un poco de menos trabajo, aunque creo que merece la pena el esfuerzo si tenéis un poco de tiempo.
Y sin más vueltas os invito a un trozo ¿quién pone el café?
* 120 gramos de leche
* 100 gramos de mantequilla derretida
* 2 huevos batidos como para hacer tortilla
* 15 gramos de agua de azahar
* La ralladura de una naranja
* 130 gramos de azúcar
* 5 gramos de sal
* 500 gramos de harina de fuerza
* 7 gramos de levadura seca de panadería
* Leche, huevo o mantequilla para pincelar antes de hornear
* Mantequilla derretida y azúcar para pincelar y espolvorear después de horneado.
Elaboración:
1. Ponemos los ingredientes de la masa en la cubeta de la panificadora siguiendo el orden en el que están escritos y amasamos. Yo utilizo la panificadora de LIDL y pongo el programa 7, de amasado para pasta que dura 15 minutos.
2. Cuando termine el amasado (que también puede realizarse a mano o en cualquier otro robot de cocina) pintamos con aceite de oliva un bol, sacamos la masa, la hacemos una bola y la ponemos en el bol. Tapamos con papel film en contacto directo con la masa y ponemos por encima del bol un paño limpio y seco.
Dejamos levar hasta que duplique su tamaño.
3. Una vez haya levado sacamos del bol y amasamos ligeramente.
4. Pesamos la masa y separamos un tercio.
5. Con la parte grande hacemos una bola y colocamos sobre un papel de hornear en la bandeja del horno.
6. El tercio de la masa lo dividimos en cuatro partes del mismo peso.
Con una de esas partes hacemos una bola, y con las otras tres restantes hacemos las tiras alargadas que simulan los huesos.
7. Colocamos una de las tiras de huesos en el centro de la bola grande y las dos restantes sobre esta, formando una x.
Para terminar colocamos la bola pequeña y tapamos con un paño seco y limpio. Dejamos en una zona cálida aproximadamente una hora y media para que leve.
8. Destapamos, pintamos con leche, huevo batido o mantequilla e introducimos en el horno precalentado a 200º C y horneamos 10 minutos. Bajamos a 190º C y pasados diez minutos más bajamos a 180ºC y horneamos 10 minutos o lo que sea necesario hasta que nuestro pan esté hecho.
Cuidado porque la parte donde apoya la bola que corona el pan tarda más en hacerse.
Si vemos que se dora en exceso tapamos con papel de aluminio.
9. Una vez terminado de hornear dejamos con la puerta entreabierta 5 minutos, sacamos, pasamos a una rejilla y dejamos enfriar por completo.
10. Pintamos con mantequilla derretida y espolvoreamos con azúcar.
Puedo asegurar que parece más laboriosa de lo que realmente es.
Lo cierto es que yo no me he dado mucha maña para hacer los cilindros de los huesos, pero como todo es cuestión de práctica y de paciencia (y probablemente de tener las manos más grandes para hacerlos de una pasada como he visto en algunos vídeos)
Para conservarlo lo he envuelto en film transparente, que igual no es muy ecológico, pero conserva bastante bien la repostería casera, y lo he dejado en la cocina porque tengo la sensación de que las masas en frío endurecen antes y sólo las meto en la nevera si llevan algún relleno como crema pastelera que sí se estropea rápidamente a temperatura ambiente.
Este año esta marcado por el caos. Mucho hablar de nueva normalidad pero yo de normal en la situación que vivimos veo poco. Como viene sucediendo desde marzo la festividad de Todos los Santos va a estar marcada por la pandemia que vivimos y afectará a muchas tradiciones.
Esperemos (cooperemos y trabajemos, que las cosas nunca se hacen solas) que el próximo año la situación sea mejor. A la vista de la evolución es absurdo pensar que vayamos a recuperar la normalidad en pocos meses y voy asimilando que esto va a ser cuestión de dos o tres años en el mejor de los casos.
Como venimos haciendo desde siempre con nuestras cocinas virtuales ponemos nuestro granito de arena para que las tradiciones no se pierdan y de un tiempo a esta parte para poner la máxima normalidad posible, aunque sea de manera virtual, en la locura de tiempo que nos ha tocado vivir.
Gracias por estar aquí una semana más. Nos leemos el jueves próximo.
Manos a la masa y ¡bon appétit!
Yo creo que te ha quedado de revista, se está haciendo muy popular por estos lares este pan, es lo que tienen las comunicaciones a larga distancia, mucho que ver internet por supuesto, que lo acerca todo tanto que parece que fuera nuestro. A mi me recuerda las tortas de pascua que se hacen en mi pueblo y que tanto nos gustan a todos con su consiguiente peligro calórico, pero con esa cantinela que tenemos siempre de "un dia es un dia", nos ponemos tibios cada año, o antes, con ellas. Muy bueno tu pan de muerto, disfrutadlo mucho, si no lo habéis hecho ya, en compañía de los vuestros.
ResponderEliminarBss
Cuca en mi caso, esta festividad ha sido toda la vida como la que tú recuerdas, triste, aunque mi madre no visitaba el cementerio, era superior a sus fuerzas, yo sí iba algún año con mis hermanas mayores, después el resto del mes de noviembre era de recogimiento, ayudaba mucho que todo el mundo hacía lo mismo, no había luces ni adornos, ni turrones ni nada de navidad, por medio hasta el mes de diciembre. Hoy en día con esto de vivir en un estado laico, se han perdido la mayoría de nuestras costumbres, buenas en su totalidad, desde mi punto de vista, y algunos están desquiciados porque han tenido que suspender la fiesta “importada” de Halloween, ¡¿Perdona?! Es que lo flipo en colores, resulta que “no celebramos” los difuntos porque pasamos de tradiciones y de religión, y resulta que nos pone como locos todo lo que venga de fuera, incluido el pan de muertos, que no es ni más ni menos que una tradición religiosa, con tintes paganos, de importación. Bien, hoy vengo peleona, no me eches cuenta Cuca, pero hay cosas que me enervan, y yo que nunca he sido de reivindicaciones radicales, hoy abogo por lo nuestro, y te ha tocado a ti aguantar la chapa, Jajajaja...
ResponderEliminar¡Venga! No te enfades conmigo, yo pongo el café, y no sentamos a desayunar, mientras charlamos largo y tendido, por supuesto, córtame un buen trozo de tu pan, que no seré yo quien le ponga ningún pero, se ve divino.
Besitos
Hola Cuca!!
ResponderEliminarPero qué preciosidad de pan!! Nunca lo he comido, y como dices, cuando veo las fotos también me recuerda al roscón de reyes.
Me ha hecho gracias lo de Lara jaja. La pobre, entre que no es comilona y encima le dices que es un pan de muerto, pues ya ahí la has rematado jeje.
Mi marido que ha viajado mucho a México por trabajo, en alguna ocasión le ha pillado esta fiesta y dice que es alucinante y que es digno de ver. Yo no sé si lo vería con los mis ojos que él, ya que nosotros nos criamos completamente con otra cultura y creencia.
Pero bueno, de verlo pues si me gustaría verlo algún día.
Besos!!
Te ha quedado estupendo por el corte se nota la miga a punto y con receta de Silvia es toda una garantía, sus masas no defraudan ;o)
ResponderEliminarAquí normalidad nada, desde esta tarde volvemos a un confinamiento a medias o sea teletrabajar para quienes podamos, cierre de las tiendas no esenciales, salvaconductos para salir a la calle... pero pero los colegios siguen abiertos y los niños más de 30 por aula.
Vamos y a entrar y salir para ir a por ellos pero oye, no para tomar el aire, que conste que así por lo menos hasta el 1 de diciembre, o sea que las navidades las veo muy pero que muy negras...
Besos,
Palmira
Cuca, siempre me ha llamado la atención la forma en que abordan este tema de la muerte en México, y también me ha llamado mucho la atención este pan desde la primera vez que lo vi por la red. Ya veo que tú te has lanzado a hacerlo y con bastante éxito. Y sobre el tema de las masas, esto merece un capítulo entero...
ResponderEliminarAbrazos!!
Hola Cuca ,tengo pendiente de hacer este pan ya un par de años y aun esta por hacer voy a ver si lo preparo este, me anoto tu receta
ResponderEliminarHola Cuca, mira que me gusta poco Hallowen, yo soy mas de castañada y panellets aunque este año sin cocina, tendré que comprarlos para poder catarlos, bueno así ayudaremos a los comerciantes que tambien lo están pasando mal.
ResponderEliminarSabes tengo muchas ganas de hacer este pan de muerto tan famoso, aun no lo he hecho nunca, otra receta pendiente para cuando tenga cocina.
Bueno a tener mucho cuidado con el virus y tener paciencia, la cosa se pone fea.
Mil besos
Cuca me has recordado a México que hacen auténticas delicias de este pan.
ResponderEliminarPero, pero el tuyo pinta muy bien :-)))))
1 saludito
Se ve muy rico , tengo ganas de hacerlo , en ingredientes me recuerda como dices tu al roscon besitos
ResponderEliminarQue ganas de hacer este pan Cuca! lo malo es que el tiempo no da para todo lo que quiero hacer. Te ha quedado maravilloso, que pintaza, tengo muchas ganas de probarlo, te ha quedado de escaparate reina...Bess
ResponderEliminarTe ha quedado un pan con muy buena pinta y seguro que está muy rico. Nunca lo he probado así que tomo nota.. Besos
ResponderEliminarHola Cuca, pero que bonito te ha quedado el pan de muerto. Ante todo, mil gracias por mencionarme, y nombrar mi blog. Qué bonito es aprender de las tradiciones y costumbres de otros países y otras culturas. Es bonito aprender de todos.
ResponderEliminarMe inicié el año pasado con el pan de muerto, y aprendí con la receta de Eva de BakeStreet, y la verdad es que me enamoró. Y este año también ya llevo uno hecho con otra receta por variar, aunque no se si haré otro. Hay mil maneras de hacerlo y de decorarlos, y están tan ricos.... Me gusta mucho como lo has decorado con las huesos por encima de seis brazos, es monisimo. Si quieres te envio una docenita de panellets que este año si que he hecho. jeje :)
Un beso :)
¡¡Hola Cuca!! Qué bien, te has animado a hacer esta receta, la verdad es que se ve estupenda. Yo no la he hecho nunca y la verdad, la conozco sólo por los blogs, pero también me ha llamado la atención siempre, bueno, es que me encantan los panes tipo brioches, me gustan muchísimo. Me pasa lo que a ti, lo que lleva agua de azahar me recuerdan a los roscones de reyes, o será porque es lo único que había probado anteriormente con ese agua, ja, ja. Es verdad que llevan su tiempo de levados este tipo de masas que por lo que tienes que estar pendiente, pero por lo demás, no lleva muchas complicaciones, y bueno, un poco de experiencia en masas, por lo menos a mí, me quedaban duras o tipo pan, pan, no bollo esponjoso. Por cierto, yo veo bien tu pan de muerto, no le veo la bola especialmente gorda ni nada, bueno, tampoco soy experta, ya te digo, no lo he hecho nunca, pero no me importaría hacerlo y sobre todo comerlo, je, je.
ResponderEliminarAy Lara, yo creo que el nombre no le ha gustado mucho y por eso no lo ha querido ni probar. Por cierto, no conozco en absoluto a Luli, claro, al no tener niños, es lo que hay, que te quedas desfasada en todo ese mundo, aunque si que me gustan las pelis de dibujos, vi Coco y me gustó mucho y está basada totalmente es estos días. Me gusta que vean la muerte así, quizás si que sea una fiesta dejar este mundo y no de la forma tétrica que nos han inculcado a nosotros. Deberíamos recordar a nuestros muertos de una forma más bonita. Besitos.
Hola Cuca.
ResponderEliminarMe parece un dulce de lo más rico e imagino el sabor tal cual lo describes, parecido al roscón.
Estuve viendo este pan dulce y lo tenía todo preparado para elaborar, pero el tiempo a veces no da a todo, tu ya sabes ... Así que el final no me ha dado tiempo, espero que en estos días pueda prepararlo.
El interior se ve divino ... y el exterior también muy apetecible
Un besazooooo
Que rico y bonito te ha quedado el pan de muerto. Las masas dulces me encantan, aunque como dices son imprevisibles por el tiempo de levado.
ResponderEliminarUna amiga cocinera que ha vivido en Italia más de 20 años, me dio un consejo para todas las masas de pan, prepararla como indique la receta pero con la mitad de levadura y dejar en la nevera hasta el día siguiente. El resultado es perfecto.
Cuidaros mucho, un abrazo.
Muy rico este pan de muerto, te ha quedado con una pinta fantástica.
ResponderEliminarEstas fechas a mi me ponen triste y no somos de celebrarlas pero con la juventud siempre hay que hacer algo especial.
Besitos guapa
Hola, Cuca. Para mí está precioso porque no debe ser tan f´ácil conseguir que la forma quede perfecto. Es una masa parecida al Roscón y a todos los panes dulces tradicionales, con las formas y diferencias que caracterizan a cada uno.
ResponderEliminarSilvia es una muy buena panadera y seguro que entre su paso a paso y la receta que has seguido, te ha sido más fácil hacerlo
Me voy con mono de comerme un trozo.
Besos, me alegra que estéis bien.
Hola Cuca no conozco a luli y Pampín, 🤷♀️pero es normal vamos en acorde con los hijos o nietos. Lo que si conozco es este pan y lo he probado de una a miga mexicana 😋tienen una manera diferente de agasajar a los muertos. Tu pan está de lujo chiquilla no tiene desperdicio 👌besinos wapa cuidaros 💪
ResponderEliminarAún llego a tiempo a prepararlo, así que a ver si mañana encuentro un hueco (me pasa como a ti con las masas, jajajaja) y damos buena cuenta de él.
ResponderEliminarUna vez más, es un placer leer tus entradas, además de tu habilidad culinaria siempre llevan una parte de ti, de tus recuerdos, de lo que estás viviendo con tu preciosa familia y eso hace que a los más mayores nos hagas recordar y sonreír.
ResponderEliminarMil gracias tanto por la receta como por todo lo que compartes.
Del confinamiento voluntario en el campo (en Castilla-León el virus enemigo parece ensañarse con la población) he regresado a mi casa en la ciudad y aquí, como tengo a mano ordenador e internet, es más fácil comunicarme con todos aquellos que me habéis arropado a lo largo de los años cuando, menos perezosa, escribía y publicaba.
Siempre me he acordado de todos vosotros, os he echado en falta y os recuerdo con muchísimo cariño.
Poco a poco tengo intención de ir visitando a todos.
Te deseo lo mejor, tus niñas estarán preciosas y crecidas.
Abrazos y cariños.
Kasioles
Cuca qué gracia me ha hecho lo de tu hija, la verdad es que el nombrecito del pan se las trae , a mi el nombre me echa para atrás , si fuera pequeña estoy segura que haría como ella , por mucho que viera a mamá haciéndolo ja ja.
ResponderEliminarTe quedó fabuloso , las masas todas son tan ricas que aunque nos den un poco de trabajo, pensar en la recompensa siempre lo hace más liviano.
En mi casa las castañas y las calabazas este año son las protagonistas, bueno como todos los demás jaja, cuando llega el otoño, no faltan en mi cocina, tanto en salado como en dulce son una auténtica bendición.
Buen fin de semana y a seguir cuidándose Cuca. Un abrazo.
Nunca hanía oído lo del pan de muerto y aunque el nombre da un poco de "repelus" la verdad es que se ve estupendo y que tiene que estar riquísimo. También me recuerda al roscón de Reyes.Gracias por tu visita ami blog. Le he dado un vistazo a tu blog y me ha gustado lo que he visto.Besicos
ResponderEliminarSe me olvidó decirte que tengo una nieta que se llama Lara.Besicos
ResponderEliminar¡Hola Cuca! A mí me pasa como a ti... será que más o menos somos de la misma generación y hemos vivido otra tradición y respeto a estos días... Aquí tampoco tenemos dulces típicos... más allá de comprar unas buenas castañas asadas, antes o después de la visita a los difuntos... o el olor de las batatas asadas de casa... pero bueno... gracias a las nuevas tecnologías, también podemos descubrir postres y tradiciones de otros rincones, como nos traes tú esta semana.
ResponderEliminarEl pan de muerto, no sé si es por el nombre o que me pasa, como a tu hija Lara jajaa... nunca me ha llamado mucho la atención y eso que las masas... me gustan mucho... pero es verdad que sobre todo este año, ha sido la receta más destacada la red... He visto bastantes y te puedo asegurar, que el tuyo es uno de los más bonitos que he visto... y quien sabe... lo mismo me da el año que viene por hacer uno... que ya se sabe... que al final... nosotras coincidimos en todo... ¡No iba a ser menos... con el pan de muerto! Jajajaa... Un beso.
Hola Cuca! Mucho tiempo ha pasado sin venir por aquí. o al menos a mí me lo parece ¡se nos arma un cacao mental con lo que tenemos encima! Me ha encantado tu pan de muerto, como no iba a ser menos. Ganas tengo de probarlo, me hago una ligera idea de como debe estar, es de los panes que apetecen. Lo he visto en IG algunas veces, parece que se ha puesto de moda. En Granada se hacen unos bollos similares que los llamamos Nochebuenos, típicos de Navidad, no llevan adornos, son bollos normales pero de una textura y sabor increíbles. Tal vez los conozcas. Entiendo a Lara perfectamente, de muertos no quiere ni oír hablar, jajaja. Gracias por todo preciosa. Me llevo un trocito de pan y de paso la receta, si encuentro un rato grande lo mismo lo hago. Besazo.
ResponderEliminarHola Cuca! Como me da gusto ver una receta mexicana como la del pan de muertos en tu blog! Y se ve que te quedo delicioso! A mi me encanta solo pero tambien los rellenos de nata o de cajeta me fascinan. Tambien hice pan de muertos, pero aun no publico la receta, me llevo un trocito del tuyo que hasta aca me llega el rico aroma!
ResponderEliminarBesos
¡Ay Cuca!, me encanta este Pan de Muertos que hoy nos dejas, yo he hecho panellets que es lo tradicional de aquí. Pobrecita Lara, no digas que es rara, si a mi de pequeña me dan Pan de Muertos, te aseguro que no me lo como, ¡qué asco!, seguro que hubiera dicho, ganándome la consiguiente reprimenda. A ver si el año que viene me animo a prepararlo. Un besazo
ResponderEliminarTe ha quedado espectacular Cuca!!!!!!!! yo es que el tema de las masas... Y mas como sean pegajosas... Nos llevamos regular nada mas!!!!!!! Pero si que es una receta que me gustaría probar. Quizá el año que viene!!!!!!!!!!!!!!!.
ResponderEliminarA mi también me llama la atención como celebran los mexicanos éste día cargados de color y alegría, cuando lo nuestro es mas de muertos, espíritus y cosas mas tristes y sombrías.
Pero sea como fuere, un trozo de éste pan con un buen café (que ya me encargo yo de poner, como pides) lo cura absolutamente todo.
Besitos
Hola Cuca, nunca he probado ni lo he hecho, pero hoy ya es el segundo que veo. El tuyo te ha quedado visualmente precioso y si has seguido el paso a paso de Silvia, adivino que estará muy rico. Aunque no lo he probado decís que os recuerda en sabor al roscón de reyes , así que ya me imagino su sabor. Repito , se ve divino. Besos.
ResponderEliminar¡Cuca! qué guai que hayas hecho esta receta. La publiqué hace unos años y la repetí nuevamente con versión chocolate. Particularmente me gustó mucho, si no, no la hubiera vuelto a repetir. Además es muy pintoresca, yo le puse un toque de color por encima y su aroma, textura nos encantó. Como la festividad en México, nada que ver con la de aquí, como relatas.
ResponderEliminarSí que tiende a parecerse a un roscón y para mí sí que es algo laboriosa, a parte de respetar los tiempos de levado pero bien merece la pena.
Que gracia Luli Pampín, la primera vez que lo escucho ¡lógico! al no tener pequeños por casa es lo que tiene.
Te deseo un bonito día. Un abrazo
¡Cuca! qué guai que hayas hecho esta receta. La publiqué hace unos años y la repetí nuevamente con versión chocolate. Particularmente me gustó mucho, si no, no la hubiera vuelto a repetir. Además es muy pintoresca, yo le puse un toque de color por encima y su aroma, textura nos encantó. Como la festividad en México, nada que ver con la de aquí, como relatas.
ResponderEliminarSí que tiende a parecerse a un roscón y para mí sí que es algo laboriosa, a parte de respetar los tiempos de levado pero bien merece la pena.
Que gracia Luli Pampín, la primera vez que lo escucho ¡lógico! al no tener pequeños por casa es lo que tiene.
Te deseo un bonito día. Un abrazo
Lo mismo que a ti me pasa a mí con esta receta, la tengo guardada desde hace siglos, y nunca me decido a hacerla, de hecho, otro año más que pasa sin haberla preparado...
ResponderEliminarA ver si me animo, aunque no sean fechas, y la hacemos en casa, porque la verdad es que me encanta la pinta que tiene! :)
Un abrazo!
Para mi que te ha quedado perfecto Cuca, este año se han visto muchos publicados y el tuyo está genial. Yo soy demasiado tradicional para estas celebraciones, pero me llama mucho la atención como lo viven en México, a ver si me animo el año que viene y lo hago.
ResponderEliminarPor los ingredientes que lleva y como se ve la miga, yo diría que también se parece mucho a los panquemaos que hacemos por aquí en Semana Santa.
Un bst bonita.
Que buena pinta tiene Cuca. El pan de muertos es también uno de mis eternos pendientes jajajajaj
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