Brownie de boniato (o batata) asado y chocolate blanco
Ahora sí que sí el otoño ha llegado.
Con sus días más cortos, vestido de colores ocres, con los mantos de hojas cubriendo las calles, con el viento frío que te asalta en el momento menos pensado y con las primeras lluvias, que aún siendo escasas, se agradecen.
Como era de esperar el otoño también está llegando a nuestras fruterías y puestos del mercado (no sabéis lo que me gustaría tener un mercado donde vivo) y es todo un placer vestir nuestras mesas con recetas calentitas, aromáticas y coloridas.
Lo creáis o no la receta que os traigo hoy lleva un año esperando en borradores. Es casi un pecado haber guardado celosamente este brownie de batata tanto tiempo pero me negaba a publicarlo fuera de temporada y que cayera en el olvido sin que pudiérais hacerlo en casa.
Como el tiempo es un remedio que lo cura (casi) todo el calendario ha dado un giro de 360 grados (cada vez más deprisa, por cierto) y los boniatos están llegando de nuevo al mercado así que no podía esperar más a compartir esta maravilla.
Hace muchos años que había visto la receta por internet, pero entonces no estaba interesada en repostear con batatas (en realidad no estaba interesada en las batatas en general y punto). Los que me seguís hace tiempo igual recordáis que fue a raíz de mi primer embarazo que de repente aquel otoño mi cuerpo me pidió comprar batatas y meterme en harina con ellas.
De aquel digamos antojo surgieron recetas tan buenas como la crema de batatas asadas o el bizcocho de batata y caí rendida ante este tubérculo que tan poco me había interesado hasta el momento a pesar de que en casa tanto mi madre como mi abuela lo preparaban asado o cocido en la olla exprés y lo servían espolvoreado con azúcar y canela tal y como un tiempo más tarde os enseñé en el blog.
A veces mi cabecita que no para de dar vueltas me recuerda que desde que tengo el blog no sólo he conocido a un montón de gente estupenda sino que me ha llevado a probar recetas e ingredientes que de otra manera probablemente no hubieran llegado a mi vida ni formarían parte de mi alimentación habitual.
Hoy mi cocina virtual se viste de otoño con esta receta y ha faltado muy poco para que por primera vez desde que abrí el blog no hubiera receta un jueves (salvo vacaciones y paradas por maternidad se entiende) En el trabajo estamos hasta arriba con las liquidaciones trimestrales y en casa...bueno, en casa es un no parar siempre.
Al final ha sido a base de sacar cuatro ratillos por las noches para editar las fotos y redactar la entrada la única manera de llegar fiel a esta cita que si bien no es una obligación es mi parcelita personal, que me recuerda que sigo teniendo cosas que son mías y sólo mías (aunque los postres siempre sean compartidos, la verdad) y que es sólo cuestión de tiempo que recupere un poquito de mi espacio.
Creo recordar que la receta de este brownie era la misma en todos los blogs en los que la encontré. Yo la hice un poquito mía incrementando la cantidad de boniato (y de canela, no puedo evitarlo) y reduciendo la de azúcar así como variando algunos ingredientes a mi gusto y según lo que había en la nevera.
El resultado ha sido francamente espectacular. Desde el color (no me negaréis que ese color naranja no es llamativo) hasta el aroma (francamente irresistible si os gusta la canela tanto como a mí, así como el olorcito de la batata asada) pasando por el sabor (la combinación batata y chocolate blanco es de lo más adictiva formando un tándem de lo más top) y acabando en la textura (súper cremosa, fundente y totalmente irresistible)
En las fotos podéis ver el brownie al "natural" (totalmente precioso con ese tono) y espolvoreado con azúcar glas. Sabéis que no soy muy amiga de añadir más azúcar de la imprescindible a las recetas y siempre voy reduciendo la cantidad. Estoy segura de que con los dedos de una mano podemos contar las recetas que tengo publicadas que he espolvoreado con azúcar (y es muy probable que sobren dedos). Mi intención no era espolvorearlo, lo había visto en las recetas que había consultado pero no me llamaba. Sin embargo cuando había acabado de hacer las fotos se me encendió la bombilla y me pareció que quedaba mono así que hice más fotos.
No puse más que una cucharadita de café, soy bastante escueta cuando espolvoreo, pero fue más que suficiente. Es que no me gustan los pasteles que tienen medio centímetro de azúcar encima.
Aparte de que no son nada prácticos para comer porque acabas poniéndolo todo perdido (amén del bigote blanco y los churretes que te dejan) no me parece que sea necesario añadir tal cantidad superflua de azúcar porque acaba empalagando el dulce al que lo añadas. Conste que para gustos los colores y que vosotros en casa podéis o no espolvorear el brownie cuando lo hagáis.
Sé que lo repito casi cada semana pero no podéis dejar de hacer este brownie. Es que os va a encantar y lo vais a repetir siempre que tengáis un boniato en casa y no sepáis muy bien qué hacer con él. Yo sólo os dejo caer que es uno de nuestros favoritos y no es precisamente uno de los más pecaminosos en cuanto a calorías se refiere.
Es más, yo creo que podríamos decir que es medio saludable y todo.
No tengo mucho tiempo más. Sólo espero que las fotos de la receta de esta semana hablen por sí solas y os animéis a prepararla en casa .Soy toda oídos si os decidís.
Para no faltar a mi costumbre, porque las buenas costumbres hay que mantenerlas contra viento y marea, aquí os dejo un trocito para compartir con vosotros la receta.
Ingredientes:
Con sus días más cortos, vestido de colores ocres, con los mantos de hojas cubriendo las calles, con el viento frío que te asalta en el momento menos pensado y con las primeras lluvias, que aún siendo escasas, se agradecen.
Como era de esperar el otoño también está llegando a nuestras fruterías y puestos del mercado (no sabéis lo que me gustaría tener un mercado donde vivo) y es todo un placer vestir nuestras mesas con recetas calentitas, aromáticas y coloridas.
Lo creáis o no la receta que os traigo hoy lleva un año esperando en borradores. Es casi un pecado haber guardado celosamente este brownie de batata tanto tiempo pero me negaba a publicarlo fuera de temporada y que cayera en el olvido sin que pudiérais hacerlo en casa.
Como el tiempo es un remedio que lo cura (casi) todo el calendario ha dado un giro de 360 grados (cada vez más deprisa, por cierto) y los boniatos están llegando de nuevo al mercado así que no podía esperar más a compartir esta maravilla.
Hace muchos años que había visto la receta por internet, pero entonces no estaba interesada en repostear con batatas (en realidad no estaba interesada en las batatas en general y punto). Los que me seguís hace tiempo igual recordáis que fue a raíz de mi primer embarazo que de repente aquel otoño mi cuerpo me pidió comprar batatas y meterme en harina con ellas.
De aquel digamos antojo surgieron recetas tan buenas como la crema de batatas asadas o el bizcocho de batata y caí rendida ante este tubérculo que tan poco me había interesado hasta el momento a pesar de que en casa tanto mi madre como mi abuela lo preparaban asado o cocido en la olla exprés y lo servían espolvoreado con azúcar y canela tal y como un tiempo más tarde os enseñé en el blog.
A veces mi cabecita que no para de dar vueltas me recuerda que desde que tengo el blog no sólo he conocido a un montón de gente estupenda sino que me ha llevado a probar recetas e ingredientes que de otra manera probablemente no hubieran llegado a mi vida ni formarían parte de mi alimentación habitual.
Hoy mi cocina virtual se viste de otoño con esta receta y ha faltado muy poco para que por primera vez desde que abrí el blog no hubiera receta un jueves (salvo vacaciones y paradas por maternidad se entiende) En el trabajo estamos hasta arriba con las liquidaciones trimestrales y en casa...bueno, en casa es un no parar siempre.
Al final ha sido a base de sacar cuatro ratillos por las noches para editar las fotos y redactar la entrada la única manera de llegar fiel a esta cita que si bien no es una obligación es mi parcelita personal, que me recuerda que sigo teniendo cosas que son mías y sólo mías (aunque los postres siempre sean compartidos, la verdad) y que es sólo cuestión de tiempo que recupere un poquito de mi espacio.
Creo recordar que la receta de este brownie era la misma en todos los blogs en los que la encontré. Yo la hice un poquito mía incrementando la cantidad de boniato (y de canela, no puedo evitarlo) y reduciendo la de azúcar así como variando algunos ingredientes a mi gusto y según lo que había en la nevera.
El resultado ha sido francamente espectacular. Desde el color (no me negaréis que ese color naranja no es llamativo) hasta el aroma (francamente irresistible si os gusta la canela tanto como a mí, así como el olorcito de la batata asada) pasando por el sabor (la combinación batata y chocolate blanco es de lo más adictiva formando un tándem de lo más top) y acabando en la textura (súper cremosa, fundente y totalmente irresistible)
En las fotos podéis ver el brownie al "natural" (totalmente precioso con ese tono) y espolvoreado con azúcar glas. Sabéis que no soy muy amiga de añadir más azúcar de la imprescindible a las recetas y siempre voy reduciendo la cantidad. Estoy segura de que con los dedos de una mano podemos contar las recetas que tengo publicadas que he espolvoreado con azúcar (y es muy probable que sobren dedos). Mi intención no era espolvorearlo, lo había visto en las recetas que había consultado pero no me llamaba. Sin embargo cuando había acabado de hacer las fotos se me encendió la bombilla y me pareció que quedaba mono así que hice más fotos.
No puse más que una cucharadita de café, soy bastante escueta cuando espolvoreo, pero fue más que suficiente. Es que no me gustan los pasteles que tienen medio centímetro de azúcar encima.
Aparte de que no son nada prácticos para comer porque acabas poniéndolo todo perdido (amén del bigote blanco y los churretes que te dejan) no me parece que sea necesario añadir tal cantidad superflua de azúcar porque acaba empalagando el dulce al que lo añadas. Conste que para gustos los colores y que vosotros en casa podéis o no espolvorear el brownie cuando lo hagáis.
Sé que lo repito casi cada semana pero no podéis dejar de hacer este brownie. Es que os va a encantar y lo vais a repetir siempre que tengáis un boniato en casa y no sepáis muy bien qué hacer con él. Yo sólo os dejo caer que es uno de nuestros favoritos y no es precisamente uno de los más pecaminosos en cuanto a calorías se refiere.
Es más, yo creo que podríamos decir que es medio saludable y todo.
No tengo mucho tiempo más. Sólo espero que las fotos de la receta de esta semana hablen por sí solas y os animéis a prepararla en casa .Soy toda oídos si os decidís.
Para no faltar a mi costumbre, porque las buenas costumbres hay que mantenerlas contra viento y marea, aquí os dejo un trocito para compartir con vosotros la receta.
Ingredientes:
* 150 gramos de chocolate blanco
* 20 gramos de mantequilla
* 3 huevos
* 70 gramos de harina
* 125 gramos de azúcar moreno
* 315 gramos de boniato asado
* 1 yogur natural (125 gramos)
* Azúcar glas para decorar (opcional)
Elaboración:
1. Asamos la batata, la pelamos cuando esté templada y la partimos en trozos.
2. Mientras se templa podemos poner el chocolate blanco y la mantequilla a derretir al baño maría o en el microondas.
3. En un bol amplio o en el vaso de la batidora si es grande ponemos los trozos de boniato, el chocolate y la mantequilla derretidos y el resto de ingredientes y batimos hasta obtener una mezcla cremosa y sin grumos.
4. Forramos un molde cuadrado de 20x20 con papel de hornear o pintamos con mantequilla o spray desmoldante y vertemos nuestra masa. Alisamos la superficie con una espátula.
5. Introducimos en el horno precalentado a 180º C y horneamos durante 45 minutos o hasta que esté cuajado.
6. Apagamos el horno, sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla. Si hemos optado por forrar el molde con papel de hornear podemos desmoldarlo al cabo de una media hora y dejarlo sobre la rejilla hasta que se enfríe por completo (así tardará menos)
7. Una vez frío, guardamos en un tupper o lata en el frigorífico hasta el momento de consumirlo.
8. Antes de servirlo lo partimos en porciones y espolvoreamos con azúcar glas.
Lo podemos consumir el mismo día que lo preparemos aunque mi consejo es hacerlo la víspera porque mejora la textura y el sabor con el reposo.
Imprescindible conservarlo en el frigorífico al llevar la batata porque acabaría malo en un par de días. Yo suelo dejarlo envuelto en el papel de hornear dentro del tupper tal y como os indico en el paso a paso.
Igual es sólo manía mía pero creo que se conserva más jugoso.
De todas formas os podéis hacer cargo de que no dura mucho en casa ¡ya lo veréis si os animáis!
Las peques siguen igual. Lara está muy contenta en su cole y en poco más de cinco semanas de curso ya he notado un cambio en ella.
Es bastante reservada y por mucho que le preguntes (directa o indirectamente) no suelta prenda de lo que hacen. Sin embargo yo que siempre estoy con la parabólica conectada la escucho hablar mientras juega porque repite con sus muñecos muchas de las cosas que hacen y dicen en clase y así me voy enterando.
A veces también cuenta cosas. El viernes pasado salieron con una bandera con motivo del día de la hispanidad y me fue contando que el capitán Colón llevaba tres barcos, dijo tierra a la vista, descubrió "la América" y trajo chocolate, patatas (fritas o no según el momento en el que lo cuente), maíz y tomate. Creo que ya sabe más que muchos adultos sobre este tema.
Está haciendo pinitos además con la escritura. Desde el curso pasado ella decía que estaba escribiendo y hacía "gusanos" en un papel y decía que estaba poniendo su nombre pero ahora ya sabe escribir la L, la A (aunque se empeña en cerrarla también por abajo, tipo ocho ji ji ji) y algo similar a la R. Partiendo de la base de que tiene tres años no se le puede pedir más.
El otro día me dejó con la boca abierta al contarme que la L no es sólo de Lara sino también de Laura, Lucía y Luca (todos niños de su clase)
Elena no avanza mucho. Es más relajada de lo que en su día fue Lara. No se mantiene muy bien sentada, se va para los lados, pero comienza a levantarse sobre las rodillas y las palmas de las manos y lo de gatear para Navidad lo tendrá dominado.
También parece que un diente le va a romper en breves, para esto sí que va más ligera que Lara, la cual estuvo sin dientes hasta los nueve meses y medio justos que le rompió el primero.
A ver si la semana próxima os puedo contar más cosas.
Quiero pediros disculpas porque esta semana estoy bastante ausente de vuestras cocinas aunque prometo ponerme al día en breve. Me faltan palabras para agradeceros vuestra fidelidad y que paséis cada semana por mi cocina virtual.
Nos leemos la semana próxima. Sed felices y disfrutad del otoño.
Imprescindible conservarlo en el frigorífico al llevar la batata porque acabaría malo en un par de días. Yo suelo dejarlo envuelto en el papel de hornear dentro del tupper tal y como os indico en el paso a paso.
Igual es sólo manía mía pero creo que se conserva más jugoso.
De todas formas os podéis hacer cargo de que no dura mucho en casa ¡ya lo veréis si os animáis!
Las peques siguen igual. Lara está muy contenta en su cole y en poco más de cinco semanas de curso ya he notado un cambio en ella.
Es bastante reservada y por mucho que le preguntes (directa o indirectamente) no suelta prenda de lo que hacen. Sin embargo yo que siempre estoy con la parabólica conectada la escucho hablar mientras juega porque repite con sus muñecos muchas de las cosas que hacen y dicen en clase y así me voy enterando.
A veces también cuenta cosas. El viernes pasado salieron con una bandera con motivo del día de la hispanidad y me fue contando que el capitán Colón llevaba tres barcos, dijo tierra a la vista, descubrió "la América" y trajo chocolate, patatas (fritas o no según el momento en el que lo cuente), maíz y tomate. Creo que ya sabe más que muchos adultos sobre este tema.
Está haciendo pinitos además con la escritura. Desde el curso pasado ella decía que estaba escribiendo y hacía "gusanos" en un papel y decía que estaba poniendo su nombre pero ahora ya sabe escribir la L, la A (aunque se empeña en cerrarla también por abajo, tipo ocho ji ji ji) y algo similar a la R. Partiendo de la base de que tiene tres años no se le puede pedir más.
El otro día me dejó con la boca abierta al contarme que la L no es sólo de Lara sino también de Laura, Lucía y Luca (todos niños de su clase)
Elena no avanza mucho. Es más relajada de lo que en su día fue Lara. No se mantiene muy bien sentada, se va para los lados, pero comienza a levantarse sobre las rodillas y las palmas de las manos y lo de gatear para Navidad lo tendrá dominado.
También parece que un diente le va a romper en breves, para esto sí que va más ligera que Lara, la cual estuvo sin dientes hasta los nueve meses y medio justos que le rompió el primero.
A ver si la semana próxima os puedo contar más cosas.
Quiero pediros disculpas porque esta semana estoy bastante ausente de vuestras cocinas aunque prometo ponerme al día en breve. Me faltan palabras para agradeceros vuestra fidelidad y que paséis cada semana por mi cocina virtual.
Nos leemos la semana próxima. Sed felices y disfrutad del otoño.
Manos a la masa y ¡bon appétit!
Uno de los productos otoñales que más me gustan es el boniato, mi poca repostería y algún plato salado más, dan fe de ello. En brownie es la primera vez que lo veo, como ya he dicho esta mañana en otro blog, no es el dulce que más me gusta por ser muy denso, pero si me lo pones con boniato, borra lo anterior. Te ha quedado muy otoñal, la estación luce mucho en fotos por sus colores maravillosos, que junto a ese brownie riquísimo está para comerse un buen cacho sin remordimientos. Lo bueno, casero y sano, tres veces bueno.
ResponderEliminarUn beso
Una combinación interesante y con un producto de temporada como el boniato, habrá que probar la receta, un beset
ResponderEliminarHola Cuca. Aquí comemos mucho boniato y calabaza asados y en repostería también se usa mucho. Es algo tradicional.
ResponderEliminarMe alegro de que ya estés disfrutando del otoño, que ya toca. Y me alegro de que hayas publicado por fin este delicioso brownie porque merece estar en el blog con todos los honores.
Tu niña es como el mío, hay que sacarles la información con pinzas. Me ha hecho gracia cómo ha aprendido sobre Colón. Y tanto que sabe más que algunos adultos...
En Navidad a ver si la pequeña se lanza y la persecución por la casa os hace descansar los riñones, que no es poco.
Me voy al mercado, aquí ha perdido mucho, la gente va más al supermercado y se nota.
Besos y feliz día.
¡¡Hola Cuca!! Si es que las fotos ya enamoran, te aseguro que con esa presentación y esos colores, sólo me cabe pensar que este brwonie está buenísimo, es lo primero que te viene a la cabeza. Ya sabes lo que me gusta el otoño y las fotos con ese aire me maravillan, así que me tienes maravillada, alucinada y con muchas ganas de probar algo así. Esto le encantaría hasta los que no le gusten el boniato, estoy convencida, ¡y con chocolate blanco! Jo, si es que no se le puede pedir más Cuca. Qué bien que tenías esta maravilla en borradores, es cierto que fuera del otoño publicarlo, no sería lo mismo. Ahora, que estamos envuelto en el otoño, por fin, nos recreamos de lleno en tu receta.
ResponderEliminarAy Lara, qué pena que no te cuente más cosas, porque es para reírte con ella sin querer. Qué viva y despierta es. Y sí, sabe más que algunos adultos de Colón.
Y por cierto, ¡ni se te ocurra venir a mi cocina hasta que estés totalmente libre! ¡No te quiero ver por allí, ya lo sabes! No tienes que cumplir con nada (bueno, más que con los papeles de Hacienda, no haya lío, ja, ja). Besitos, nos vemos el jueves que viene (tienes que sacar un hueco este finde para hornear) Besitos.
Nunca probe el boniato, pero el brownie tiene una pinta deliciosa.
ResponderEliminarTremendo recetón que nos traes hoy Cuca!!!!!!!! Yo me he hecho una fan reciente a la batata y me parece que ésta combinación con chocolate blanco es espectacular, y ese corte deja entre ver un interior de lo mas chunky. Como te entiendo con lo de las recetas en borradores, a mi también me ha pasado en alguna ocasión.
ResponderEliminarMe alegro que las niñas vayan tan bien!!!!!!!!!!!!!!!
Un besote.
Cuca, me alegro que a pesar de que hayas tenido un año guardada la receta de este brownie, al fin la hayas publicado, porque te digo que merece la pena y, mientras te leía... me imaginaba en mi cabeza cómo veganizarlo, jajaja... así que con tu permiso, me llevo tu receta a mi terreno; pues tiene una pintaza increíble!! Me encanta!! En serio, me has conquistado....
ResponderEliminarQué linda Lara, con todo lo de América y Colón, es que con esa edad, están para comérselos. Lo de Elena, no te preocupes, que enseguida se echará a andar, en menos que cante un gallo y ya verás con las dos princesas revoloteando por ahí... jajaja!!
Disculpa que llevaba, creo, como dos semanas, sin venir por tu cocina... pero es que últimamente, también ando que no paro... ya os contaré en el blog. Besos para todas y disfrutad del otoño, que es la época del año que más me gusta...
El otoño llega...las fruterías empiezan a oler a esta estación que con su caída de hojas y su fresquito nos anima a encender el horno. El boniato aún no lo usé, aunque si lo he probado. Te quedó un brownie con una pintaza increíble. besinos wapa
ResponderEliminarCuca, imagino que estarás con los temas fiscales del trimestre.. vaya puñetería, si nos lo pusiesen cada seis meses también lo dejaríamos hasta el último minuto. Ellos siempre se aseguran el cobro... ja, ja, ja. Puñeteros.
ResponderEliminarMe encantan tus historias de las chiquititas, a ellas les gustarà mucho leer estas historias y saber que cientos de personas sabíamos de sus vidas y sus cosas extraordinarias. Yo siempre recuerdo lo del “forso” y me río mucho.
Se hacen grandes rápido, por eso hay que aprovecharlos ahora de pequeños, muchas veces se van con dieciocho años a estudiar a otra ciudad y ya apenas vuelven y solo por vacaciones y luego los trabajos y las novias y ¡hala! A vivir que es lo mejor.
Bueno, tu brownie me ha gustado mucho y aunque hago pocas cosas con las batatas me encantan y yo igual, a todo le quito azúcar, ni miro las recetas que dicen “400 gramos de azúcar” ¿te imaginas? Un horror, sobre todo para mí que no soy golosa.
Muchos besos a las tres
Tomo nota para hacerla que me encanta el boniato y tiene una pinta estupenda. Me alegro de que haya estado un año esperando la receta que sino se me habría pasado,jeje. Bsts
ResponderEliminarQue bueno tiene que estar . con lo que me gusta el boniato, tendre que probarlo, besitos
ResponderEliminarQuerida Cuca, no tienes que excusarte para nada, vienes cuando se puede, ya nos conocemos lo suficiente como para saber algo de nuestras historias, además que entre amigas todo se entiende.
ResponderEliminarMientras leía tu post, no sé porqué, pero mi cabeza no dejaba de pensar en lo mismo, ya sé que es una tontería, y que un nombre no define el resultado final de algo, pero si a un bizcocho de este tipo se le llama brownie por su color, o blondie por ser de chocolate blanco, no puedo dejar de mirar el tuyo y me tiene fascinada, no solo porque el boniato me encanta desde niña, sino por su bonito color naranja, y ahí es a dónde quería llegar, si es naranja, no marrón, ni amarillo, lo podríamos llamar Orangie, ya sabes por aquello de naranja=orange, una tontería, lo que yo decía, pero no deja de sonarme en mi cabeza, jajajajajajaja...
Bueno lo de Lara es sorprendente, los niños de hoy son muy espabilados, pero no es lo habitual, que reconozcan las letras tan pronto, y te lo dice alguien que ya leía con cuatro años, claro está no correctamente, pero lo suficiente como para formar las palabras con sentido.
Un besito para las tres, en especial para Elena, que tiene unos cachetitos pa'comérselos, jejeje...
Me encantan las batatas. Con estos ingredientes, sin duda, tienen que estar de lujo estos brownies. La pinta es fantástica.
ResponderEliminarSaludos
Antes de tener una cesta eco fija cada semana, no solíamos comprar boniatos excepto para la castanyada, que es la vigila de todos santos en Catalunya. Pero ahora como el boniato está de moda pues en la cesta eco nos ponen a menudo y hay que darles salida. En dulces no lo suelo usar pero este brownie pinta la mar de bien!
ResponderEliminarYa verás que dentro de nada escribe su nombre (tiene suerte es cortito jajaja) y lee del tirón o casi!
Besos y feliz fin de semana,
Palmira
Hola Cuca!!
ResponderEliminarCon estas fotos y este dulce desde luego que el otoño ya está aquí. Preciosas y rico seguro que un montón.
Siempre hay un comienzo con algo que antes nunca habíamos probado o hecho. Yo también utilizo ahora el boniato y la calabaza mucho, cosa que antes nada de nada.
Que una niña tan pequeña te hable ya sobre la historia de Cristobal Colón es para dejarte con la boca abierta. Qué graciosa jeje
Besitos!!
Cuca, hubiera sido un pecado que te hubieras dejado este brownie entre bambalinas sin salir a la luz.
ResponderEliminarTiene que estar de vicio , así que muchas gracias por compartirlo.
Los peques siempre nos sorprenden con sus cosas y con lo espabilados y listos que son ahora.
Disfruta mucho de esta etapa que es maravillosa .
Un abrazo y feliz finde.
Cuca, me has puesto a pensar que no tengo recetas con batata, hay que ponerle remedio a esto! Tu brownie delicioso, me gusta el aspecto del interior, se ve cremoso, que rico!
ResponderEliminarCuando decías del azúcar glass sobre el bizcocho imaginé llevándome un trozo a la boca y que al mismo tiempo respires y se te venga el azúcar por la nariz!! Jaja, cough, cough!! Son terribles esos episodios.
Yo también me entero de las rutinas de la escuela gracias a los juegos de mi hija, ella juega a la escuelita y allí le dice a los muñecos lo mismo que la maestra les dice a ellos en el salón, jaja! Hasta hace filas con los muñecos para "ir al comedor"! Los niños son una maravilla y un regalos amoroso de la vida.
Besos para las tres, me voy con mi trocito de brownie para comerlo de regreso! Feliz fin de semana!
Yo tampoco uso mucho las batatas y eso que en Canarias es muy típico, hacen unas empanadillas dulces rellenas de batata, espectaculares.
ResponderEliminarEste brownie tiene que estar de muerte lenta.
Besitos guapa
Te puedes creer que a mí me está pasando igual no dejo de ver recetas con boniato y batata pero ni lo he catado ni aun me animado a comprarlo seguro que una vez lo haga no dejare de hacer cosas con ellos como tú 😉
ResponderEliminarUuuumm pintaza tiene ese brownie ,te ha quedado de relujo y no dudo ni un segundo que está de rexupete , una pena no poder dar cuenta de un trozo.
Me alegra que Lara esté tan contenta en el cole y desde siempre he visto que es una niña muy lista seguro que será la delegada de clase en más de un curso .
Elena va a su ritmo no todos los niñy tienen que ser ni hacer todo en una fecha determinada , cuando menos te lo esperes gateara y estará sentada 😉 no te agobies por eso .
Bicos mil para los cuatro y feliz fin de semana wapa 😘
La calabaza, el boniato y el membrillo, las frutas más otoñales, al menos en cuestión de colores y sabores!! me gustan mucho los dulces hechos con ellas y por su puesto tu brownie, se ve genial!!Bs.
ResponderEliminarQue buena pinta tiene Cuca. Ya tengo otra escusa para comprar boniatos jajajaj yo es que soy feliz desde que los veo en la frutería. Los hago mucho en casa al horno como si fueran patatas "fritas", pero no lo he usado nunca en repostería. Me tengo que animar este año ;)
ResponderEliminarQue buena pinta tiene Cuca. Ya tengo otra escusa para comprar boniatos jajajaj yo es que soy feliz desde que los veo en la frutería. Los hago mucho en casa al horno como si fueran patatas "fritas", pero no lo he usado nunca en repostería. Me tengo que animar este año ;)
ResponderEliminarSe ve muy bien.
ResponderEliminarMe encanta el boniato en dulce :-)))
Por aquí los boniatos son una rara avis, no hay costumbre y son difíciles de encontrar; yo no los he comido en mi vida así que soy incapaz de imaginar el sabor de su brownie, aunque el aspecto es desde luego muy apetitoso y la descripción que haces, aún más.
ResponderEliminarY coincido contigo en lo del azúcar glas, sólo sirve para añadir más azúcar de la necesaria y para ponerlo todo perdido al comer, aunque estéticamente a veces los postres se vean mejor con un poquito.
Buen fin de semana.
Holaaaaaaaa cucaaa!!! Ya ha llegado el fresco ehhh da gusto poder encender el horno y hacer cosas tan ricas, cada día me gusta más bel boniato en los postres. Lo he probado en brownie negro pero con choco blanco no,apuntado :). Te imagino pisando hojas crujientes del suelo y bailando bajo la lluvia con lo q he gusta jijiji besicosssss
ResponderEliminarQué buena pinta tiene, seguro que el brownie de batata está muy rico. La batata al horno me gusta mucho.....Besos
ResponderEliminarQue bueno Cuca! A mi me encanta la batata asada, la us mucho en postres, es muy agradecida. Te ha quedado un postre de lujo. Besos
ResponderEliminar¡Hola Cuca! Antes de nada, no tienes que disculparte por no poder visitarnos o incluso por no llegar a tiempo un jueves... nosotras seguiremos siendo fiel a tu cocina, como lo hemos sido siempre... Te entiendo muy bien... porque tengo la sensación... que cada semana que pasa... me falta unos minutos con respecto a la anterior... y no encuentro ese respiro que me devuelva las horas que echaba tranquilamente en la cocina, hace unos años... Aún así... el momento de cocinar es terapéutico para mí y recargo pilas siempre...
ResponderEliminarEl brownie se ve delicioso Cuca... yo tengo un de batata y piñones que nos gustó mucho el sabor... pero al hacerlo de chocolate... el color no me quedó tan bonito como el tuyo con chocolate blanco... Me llevo la receta, porque tengo que hacerla un día... Un beso y feliz semana.
Hola, me muero de ganas por probar este rico bizcocho. No lo he hecho nunca con boniato pero por las imagenes ya me imagino su sabor, imponente. Bienvenido sea el otoño si siempre va acompañado de recetas como esta. Besos.
ResponderEliminarUn brownie original, distinto a todos los que he probado y que no dudo, viniendo de tu cocina, que sea un bocadito delicioso.
ResponderEliminarEs de mucho agradecer que saques tiempo para compartir con todos nosotros tan rica receta.
Cariños y buena semana.
kasioles
Bueno Cuca, la verdad es que no soy nada batatera en realidad. Nunca hubo costumbre en mi casa, mi madre no creo que hubiera sabido qué hacer con una batata, jajaja. Y a decir verdad, yo tampoco, para qué te voy a engañar. Si encima me dices que se puede hacer un brownie con ellas, flipo, jajaja. Y encima tiene una pinta que te mueres! En fin, hoy he aprendido una cosa más gracias a tí. Me encanta lo que has hecho, me dan ganas de probarlo ya mismo.
ResponderEliminarMe alegro mucho de que todo vaya bien por casa. Las dos nenas te tienen que llevar de cabeza todo el tiempo que te queda libre después de trabajar y todo lo demás. Se me ha olvidado como se hacía eso de sacar tiempo hasta debajo de las piedras... Hoy ha estado mi nieta en casa y es un terremoto que de momento sólo gatea pero no para quieta ni un minuto... lo peor es que me he descubierto disfrutando al saber que se la llevaban a su casa en breve (soy mala, jajaja). O sea, que hay un tiempo para cada cosa y eso está bien.
Un beso muy grande
Cuca , me encanta el boniato , asi que este brownie me parece fabuloso , que ricura .
ResponderEliminarbesinos
Hola Cuca ! que buena pinta !! a mi marido le encanta la batata cocida y con azúcar y canela ,pero en pastel no la he preparado y no me voy a quedar con las ganas por que se ve realmente delicioso ,ya te contare
ResponderEliminarbesitos
Hola Cuca, con boniato asado he probado bizcocho y me encanta el sabor que le da. Ahora con chocolate blanco no, y solo de verlo ya se que me gusta. Tiene que estar tremendo, solo hay que ver las imágenes para relamerse. Besos :)
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