Brownie de calabacín y chocolate especiado. Receta vegana
Todos sabéis que en casa tenemos la suerte de disfrutar de frutas y hortalizas del huerto de mi padre.
Desde que se jubiló, y para mantenerse activo y ocupado, todos los veranos planta tomates, calabacines, calabazas (esto a insistencia mía) judías verdes, berenjenas, pepinos, sandías, cebollas...así que desde hace unos meses os hacéis cargo de que en la frutería nos han dado por desaparecidos.
Además están los árboles frutales. Peras, manzanas, ciruelas e higos han llenado este verano el frutero de mi casa. A veces resulta agotador enfrentarte cada día a los mismos alimentos pero no vamos a salir corriendo a comprar otro tipo de fruta o de verduras sólo por aburrimiento (aunque ya os adelanto que mi señor costillo se ha presentado algún día con fruta cuando ha regresado de la compra. Sin comentarios)
A esto le uno a mi padre diciendo un día sí y otro también que ha traido chorrocientos calabacines y que a ver si gastamos más que si no vamos a gastarlos otro año no pone hortaliza (y os aseguro que rara vez hay que tirar algo)
El sermón de todos los veranos. Y yo agotadita perdida diciéndole "pero papá si esta semana ya he hecho crema de calabacín, lasaña de calabacín, salteado de calabacín y calabacín rebozado y frito...que nos falta desayunar calabacín"
Y en ese preciso momento se hizo la luz. Un milagro. Porque estábamos en pleno agosto, con el sol entrando a raudales por las ventanas y de repente el mundo brilló aún más.
¡Claro que podía meter el calabacín en el desayuno! ¡y sin necesidad de verme acompañando la leche con crudités de calabacín! Con lo bien que funciona el calabacín en repostería tenia ante mí un abanico de posibilidades casi infinito para que los calabacines fueran rebajándose a un ritmo aún más alegre.
El único inconveniente era que estábamos en pleno verano, pero horneando bien temprano o por la noche el calor sería soportable. En todo caso el resultado bien lo iba a merecer.
En el blog ya tengo algunas recetas elaboradas con calabacín como este bizcocho de calabacín y chocolate (de las primeras recetas que compartí con vosotros), gofres con chocolate, unos bizcochitos muy resultones acompañados de un buen helado o el bizcocho de calabacín y limón.
Había que seguir explorando nuevas combinaciones, nuevas maneras de presentarlo, pero sobre todo había que utilizar muchísimo calabacín.
Y entre prueba y prueba tengo en borradores más de una receta dulce con calabacín que poquito a poco irán viendo la luz.
Por empezar por algún lado le ha tocado el turno a este brownie. Que además de saludable es vegano.
Una de las primeras ideas que tuve fue hacer un brownie y rápidamente recurrí a Google para buscar recetas e inspiración.
Fue toda una sorpresa descubrir que prácticamente no hay ninguna (frente a las miles de versiones de bizcochos con calabacín que podemos encontrar) así que más ganas me entraron de hacer mi propio brownie.
Me inspiré en esta receta, aunque yo he variado cantidades a mi gusto (incrementando considerablemente la cantidad de calabacín por ejemplo) y el resultado ha sido más que aceptable.
He de reconocer que era bastante excéptica cuando lo metí en el horno.
El aspecto no era el más apetecible. Aquello parecía un engrudo. La culpa fue mía por aprovechar un resto de salvado de trigo que tenía en la despensa desde hace un montón. Si le añadís sólo harina la cosa mejorará considerablemente.
La mezcla era rara. Era una especie de pasta que me hacía dudar si una vez en el horno eso iba a cuajar, pero como nunca tiro la toalla por adelantado seguí adelante y me llevé toda una sorpresa.
No sólo cuajó sino que además olía muy bien y cuando lo probamos ¡estaba buenísimo! El salvado le da una textura (además de la apariencia) diferente a los brownies tradicionales, pero el añadido extra de fibra, al menos en mi caso, lo compensa (por no hablar de ir acabando paquetes de los que rondan por los armarios)
Por si aún queda algún excéptico en lo que a utilizar verduras en las masas se refiere os diré que en absoluto nadie notaría por el sabor que el brownie lleva calabacín.
Pero la textura y la humedad que aporta son brutales ¡es que salta a la vista!
El sabor a chocolate es bastante pronunciado. Utilicé un cacao en polvo especiado que me había tocado en un sorteo y estaba sin abrir y ha sido todo un acierto porque la combinación de especias le dan un toque tan delicioso como atractivo.
Siempre podéis utilizar cacao en polvo normal y añadir especias a vuestro gusto o no según lo que os apetezca ese día o las ganas que tengáis de enredar en la cocina.
Y como siempre que hago un brownie me acordé de mi amiga Olga que no para de decir que un brownie sin nueces no es un brownie y ahí que las metí. Si queréis reducir el aporte calórico se las quitáis, o ponéis menos cantidad. También podéis añadir trozos de chocolate o cualquier cosa que se os ocurra y que tengáis en casa.
A nosotros nos ha gustado bastante y por tanto merece un hueco en mi cocina virtual.
Os adelanto que no va a ser el único brownie con calabacín que veáis desfilar por aquí. Pero tranquilos que no me voy a volver "mono-ingrediente" y en sucesivas semanas publicaré recetas con diferentes ingredientes típicos de esta época.
Espero que os animéis a preparar esta receta, que insisto que merece muchísimo la pena y no os va a defraudar ¿acaso no os llama este cachito que tengo guardado para vosotros?
Ingredientes:
A esto le uno a mi padre diciendo un día sí y otro también que ha traido chorrocientos calabacines y que a ver si gastamos más que si no vamos a gastarlos otro año no pone hortaliza (y os aseguro que rara vez hay que tirar algo)
El sermón de todos los veranos. Y yo agotadita perdida diciéndole "pero papá si esta semana ya he hecho crema de calabacín, lasaña de calabacín, salteado de calabacín y calabacín rebozado y frito...que nos falta desayunar calabacín"
Y en ese preciso momento se hizo la luz. Un milagro. Porque estábamos en pleno agosto, con el sol entrando a raudales por las ventanas y de repente el mundo brilló aún más.
¡Claro que podía meter el calabacín en el desayuno! ¡y sin necesidad de verme acompañando la leche con crudités de calabacín! Con lo bien que funciona el calabacín en repostería tenia ante mí un abanico de posibilidades casi infinito para que los calabacines fueran rebajándose a un ritmo aún más alegre.
El único inconveniente era que estábamos en pleno verano, pero horneando bien temprano o por la noche el calor sería soportable. En todo caso el resultado bien lo iba a merecer.
En el blog ya tengo algunas recetas elaboradas con calabacín como este bizcocho de calabacín y chocolate (de las primeras recetas que compartí con vosotros), gofres con chocolate, unos bizcochitos muy resultones acompañados de un buen helado o el bizcocho de calabacín y limón.
Había que seguir explorando nuevas combinaciones, nuevas maneras de presentarlo, pero sobre todo había que utilizar muchísimo calabacín.
Y entre prueba y prueba tengo en borradores más de una receta dulce con calabacín que poquito a poco irán viendo la luz.
Por empezar por algún lado le ha tocado el turno a este brownie. Que además de saludable es vegano.
Una de las primeras ideas que tuve fue hacer un brownie y rápidamente recurrí a Google para buscar recetas e inspiración.
Fue toda una sorpresa descubrir que prácticamente no hay ninguna (frente a las miles de versiones de bizcochos con calabacín que podemos encontrar) así que más ganas me entraron de hacer mi propio brownie.
Me inspiré en esta receta, aunque yo he variado cantidades a mi gusto (incrementando considerablemente la cantidad de calabacín por ejemplo) y el resultado ha sido más que aceptable.
He de reconocer que era bastante excéptica cuando lo metí en el horno.
El aspecto no era el más apetecible. Aquello parecía un engrudo. La culpa fue mía por aprovechar un resto de salvado de trigo que tenía en la despensa desde hace un montón. Si le añadís sólo harina la cosa mejorará considerablemente.
La mezcla era rara. Era una especie de pasta que me hacía dudar si una vez en el horno eso iba a cuajar, pero como nunca tiro la toalla por adelantado seguí adelante y me llevé toda una sorpresa.
No sólo cuajó sino que además olía muy bien y cuando lo probamos ¡estaba buenísimo! El salvado le da una textura (además de la apariencia) diferente a los brownies tradicionales, pero el añadido extra de fibra, al menos en mi caso, lo compensa (por no hablar de ir acabando paquetes de los que rondan por los armarios)
Por si aún queda algún excéptico en lo que a utilizar verduras en las masas se refiere os diré que en absoluto nadie notaría por el sabor que el brownie lleva calabacín.
Pero la textura y la humedad que aporta son brutales ¡es que salta a la vista!
El sabor a chocolate es bastante pronunciado. Utilicé un cacao en polvo especiado que me había tocado en un sorteo y estaba sin abrir y ha sido todo un acierto porque la combinación de especias le dan un toque tan delicioso como atractivo.
Siempre podéis utilizar cacao en polvo normal y añadir especias a vuestro gusto o no según lo que os apetezca ese día o las ganas que tengáis de enredar en la cocina.
Y como siempre que hago un brownie me acordé de mi amiga Olga que no para de decir que un brownie sin nueces no es un brownie y ahí que las metí. Si queréis reducir el aporte calórico se las quitáis, o ponéis menos cantidad. También podéis añadir trozos de chocolate o cualquier cosa que se os ocurra y que tengáis en casa.
A nosotros nos ha gustado bastante y por tanto merece un hueco en mi cocina virtual.
Os adelanto que no va a ser el único brownie con calabacín que veáis desfilar por aquí. Pero tranquilos que no me voy a volver "mono-ingrediente" y en sucesivas semanas publicaré recetas con diferentes ingredientes típicos de esta época.
Espero que os animéis a preparar esta receta, que insisto que merece muchísimo la pena y no os va a defraudar ¿acaso no os llama este cachito que tengo guardado para vosotros?
* 550 gramos de calabacín
* 125 gramos de aceite de girasol
* 130 gramos de azúcar moreno
* 125 gramos de salvado de trigo (se puede sustituir por harina)
* 80 gramos de harina de espelta
* 25 gramos de cacao en polvo especiado
* Una cucharada de esencia de vainilla
* Una cucharadita de bicarbonato sódico
* 120 gramos de nueces peladas
* 125 gramos de aceite de girasol
* 130 gramos de azúcar moreno
* 125 gramos de salvado de trigo (se puede sustituir por harina)
* 80 gramos de harina de espelta
* 25 gramos de cacao en polvo especiado
* Una cucharada de esencia de vainilla
* Una cucharadita de bicarbonato sódico
* 120 gramos de nueces peladas
Elaboración:
1. Ponemos el calabacín troceado en el vaso de la batidora junto con el aceite y batimos hasta obtener una pasta sin grumos.
2. Vertemos en un bol y añadimos el azúcar y el cacao junto con la esencia de vainilla y el bicarbonato y mezclamos hasta integrar.
3. Incorporamos el salvado y la harina y mezclamos hasta obtener una masa homogénea.
4. Por último añadimos las nueces y repartimos bien.
5. Vertemos la masa en un molde 20x20 cubierto con un papel de hornear y alisamos la superficie con una espátula.
6. Introducimos en el horno precalentado a 180 grados y horneamos de 40 a 45 minutos.
7. Dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.
Para conservarlo yo lo metí en un tupper, sin quitarlo del papel de hornear ¡y al frigorífico directo!
Se conservó perfectamente durante casi una semana.
¿Tanto duró? Sí, porque había hecho más experimentos con calabacín y había donde elegir cuando el antojo de dulce nos llama. Además esta que escribe se puso las pilas en agosto para ir recuperando poco a poco el peso pre embarazos.
Ya he recuperado el peso que tenía cuando me quedé embarazada de Elena. Pero no he parado ahí porque entonces contaba con tres kilos extra que me había ganado con todas las recetas que preparé el pasado año típicas de Semana Santa para el blog.
Esos me están costando más, aunque tengo la esperanza de que al regresar a la jornada partida (la de verano pasó a mejor vida el viernes pasado y desde el lunes estoy mañana y tarde en la oficina) y la de vueltas que doy repartiendo y recogiendo niñas se vayan cayendo solitos en un par de meses (soy muy optimista)
Así que seguro que en vuestra casa dura bastante menos porque el brownie está espectacular.
Balance de la semana de la república independiente de mi casa.
Elena empezó a vomitar el sábado. De manera espontánea y sin motivo aparente una hora después de comer lo vomitó todo. Yo entré en pánico porque era el primer día que le daba pescado y me temía una reacción alérgica aunque no tenía más síntomas.
El domingo vomitó varias horas después de merendar. Lunes visita a la pediatra. Tiene mocos en la garganta. Paciencia y muchas lavadoras.
El señor padre amaneció también con gastroenteritis el lunes. Por lo visto tenemos un virus pululando por el pueblo. Yo creo que está haciendo operación pre boda, porque el sábado es el gran día y nuestra pequeña Lara será una de las niñas que le lleven las arras a los novios.
Estoy bastante nerviosa. Tengo muchas ganas de que llegue el día y de que pase. De que llegue para echar un buen rato. De que pase y que todo haya ido bien. Además de cruzar los dedos para que todos estemos bien y no tengamos fiebres, vómitos, mocos, diarreas...¡es que nos toca todo!
Lara y yo por el momento nos libramos. En mi caso porque no tengo tiempo ni de ponerme enferma. Lara me dio el susto la noche del lunes. Despertó a las 03:40 y vomitó en la cama (sobra decir que la noche de sueño terminó para mí en ese momento). Mucho me temía que su padre le hubiera pegado la gastroenteritis así que se quedó en casa de mis padres a la espera de ver cómo evolucionaba, pero como por suerte siguió bien ayer ya estuvo de nuevo en el colegio.
Como ya no tengo jornada de verano recojo a Lara a la salida del colegio y come con nosotros en casa. Después la dejo en casa de mi madre y vuelta a la oficina. Son ritmos y rutinas diferentes a los que teníamos hasta ahora y debemos empezar a funcionar con esta nueva situación.
Es complicado. Son muchos cambios para Lara. Pero creo que encontraremos un punto cómodo para todos. Tiempo al tiempo.
La semana próxima espero contaros más cosas interesantes y tener menos mocos y virus que compartir. Pero es lo que toca los dos primeros años de guardería mientras Elena se inmuniza.
Espero que os haya gustado la receta de hoy. La semana que viene os espero con este rincón. Mientras tanto sed felices y disfrutad de este tiempo tan magnífico.
Para conservarlo yo lo metí en un tupper, sin quitarlo del papel de hornear ¡y al frigorífico directo!
Se conservó perfectamente durante casi una semana.
¿Tanto duró? Sí, porque había hecho más experimentos con calabacín y había donde elegir cuando el antojo de dulce nos llama. Además esta que escribe se puso las pilas en agosto para ir recuperando poco a poco el peso pre embarazos.
Ya he recuperado el peso que tenía cuando me quedé embarazada de Elena. Pero no he parado ahí porque entonces contaba con tres kilos extra que me había ganado con todas las recetas que preparé el pasado año típicas de Semana Santa para el blog.
Esos me están costando más, aunque tengo la esperanza de que al regresar a la jornada partida (la de verano pasó a mejor vida el viernes pasado y desde el lunes estoy mañana y tarde en la oficina) y la de vueltas que doy repartiendo y recogiendo niñas se vayan cayendo solitos en un par de meses (soy muy optimista)
Así que seguro que en vuestra casa dura bastante menos porque el brownie está espectacular.
Balance de la semana de la república independiente de mi casa.
Elena empezó a vomitar el sábado. De manera espontánea y sin motivo aparente una hora después de comer lo vomitó todo. Yo entré en pánico porque era el primer día que le daba pescado y me temía una reacción alérgica aunque no tenía más síntomas.
El domingo vomitó varias horas después de merendar. Lunes visita a la pediatra. Tiene mocos en la garganta. Paciencia y muchas lavadoras.
El señor padre amaneció también con gastroenteritis el lunes. Por lo visto tenemos un virus pululando por el pueblo. Yo creo que está haciendo operación pre boda, porque el sábado es el gran día y nuestra pequeña Lara será una de las niñas que le lleven las arras a los novios.
Estoy bastante nerviosa. Tengo muchas ganas de que llegue el día y de que pase. De que llegue para echar un buen rato. De que pase y que todo haya ido bien. Además de cruzar los dedos para que todos estemos bien y no tengamos fiebres, vómitos, mocos, diarreas...¡es que nos toca todo!
Lara y yo por el momento nos libramos. En mi caso porque no tengo tiempo ni de ponerme enferma. Lara me dio el susto la noche del lunes. Despertó a las 03:40 y vomitó en la cama (sobra decir que la noche de sueño terminó para mí en ese momento). Mucho me temía que su padre le hubiera pegado la gastroenteritis así que se quedó en casa de mis padres a la espera de ver cómo evolucionaba, pero como por suerte siguió bien ayer ya estuvo de nuevo en el colegio.
Como ya no tengo jornada de verano recojo a Lara a la salida del colegio y come con nosotros en casa. Después la dejo en casa de mi madre y vuelta a la oficina. Son ritmos y rutinas diferentes a los que teníamos hasta ahora y debemos empezar a funcionar con esta nueva situación.
Es complicado. Son muchos cambios para Lara. Pero creo que encontraremos un punto cómodo para todos. Tiempo al tiempo.
La semana próxima espero contaros más cosas interesantes y tener menos mocos y virus que compartir. Pero es lo que toca los dos primeros años de guardería mientras Elena se inmuniza.
Espero que os haya gustado la receta de hoy. La semana que viene os espero con este rincón. Mientras tanto sed felices y disfrutad de este tiempo tan magnífico.
Manos a la masa y ¡bon appétit!
Que suerte tener a mano un huerto casero!. El brownie te ha quedado estupendo. Me parece una idea fantástica introducir verduras en la dulces.
ResponderEliminarSaludos
A mi me parece un brownie rústico, como diría nuestra amiga Isabel Rescalvo, muy saludable y muy rico. Y con producto de confianza, ¿qué más se puede pedir? En los tiempos que corren, que nada es lo que parece, ésto sí es lo que parece, da gusto verlo y quién pudiera probarlo y encima adelgazar, como te ocurre a ti, porque te aseguro que un buen cacho le quitaba yo y no me iban a doler prendas.
ResponderEliminarVeo que ya ha comenzado el tema mocos y vómitos infantil, solo puedo decirte que paciencia, ya sabes que esto funciona así.
Un beso.
me encanta el brownie. lo probaré con tu receta. muchas gracias! una pregunta cual es la harina de espelta?
ResponderEliminar¡Hola! Me alegro mucho de que te haya gustado la receta y te hayas animado a prepararla. La espelta es una variedad de trigo. La harina de espelta es una harina integral, más saludable que la harina refinada (harina blanca de trigo) que habitualmente utilizamos en la repostería casera.
EliminarLa puedes encontrar con facilidad en supermercados del tipo Carrefour y Mercadona, pero también puedes sustituirla por harina integral (de venta en todos los supermercados) o incluso por harina blanca si es la que tienes en casa.
Gracias por tu comentario.
Cuca como te decía hace un ratito en DBM, me encanta leerte, no siempre tengo tiempo para hacerlo del tirón, y vuelvo varias veces a tu cocina, pero no tengo problemas, cuando algo me gusta, no me canso jamás.
ResponderEliminarTe entiendo con lo de la cosecha del huerto, a estas alturas del año, mi padre ya tiene la tierra preparada para descansar, excepto una parte donde se resisten las berenjenas blancas que este año han sido espectaculares, ayer precisamente hice una Tortilla de Berenjena Blanca con Cheddar para el mediodía, pero no la voy a publicar porque ya tengo varias con berenjenas en el blog, no obstante me encantó. Supongo que igual te pasa a ti con tus bizcochos y demás, parecen lo mismo, pero no lo son, es evidente. El aspecto de este brownie de Calabacín te ha quedado perfecto, la miga se ve densa y húmeda, a la vez que promete ser chocolatoso al máximo, de esos bocados que te llenan la boca de placer hasta decir basta, Jajajaja, ¡Qué rico!
No sé si en mi casa duraría una semana, depende de los que vengan a la hora del café por la tarde, pero si promete ser una delicia, ganas dan de no compartirlo, comérselo a solas, y a escondidas, no hay mayor placer que disfrutar de lo que nos gusta a tope, aunque luego la “mala” conciencia no nos deje dormir, Jajajaja
Besitos para tus peques, ya verás que el sábado lo disfrutas como si nada.
Te ha quedado con una pinta buenisima, me comentaron que el bizcocho de calabacin está de lujo y lo tengo pendiente de hacer, pero este brownie tambien lo apunto, te quedó espectacular.
ResponderEliminarBesitos guapa
Eres una privilegiada por poder disfrutar de esos productos de vuestra propia huerta que nada tienen que ver con los que compramos en la frutería. Recuerdo cuando vivía mi suegro, nos surtía de pimientos, tomates, cebollas, calabazas, frambuesas, pepinillos, espárragos etc, a él le encantaba estar activo y nosotros disfrutábamos de su buena mano de agricultor, enfin qué tiempos, cuanta añoranza...
ResponderEliminarLos bizcochos con hortalizas siempre ganan en jugosidad y este brownie no iba a ser menos.
Las fotos hablan por sí solas , quien pudiera ahora mismo pillar un pedacito para acompañar el café que me estoy tomando.
Un abrazo.
Nada como los productos de la huerta yo tambien tengo la suerte de disfrutar de ellos mis tios me surten bien aunque este año apenas hemos comido tomates ,en cambio los calabacines nos salian por los ojos he echo bizcocho de calabacin pero brownie no asi que tomo nota que alguno aun queda por la huerta.
ResponderEliminarTe ha quedado divinisimo no lo siguiente de buena gana daba cuenta de un trozo relamiendome me tienes que lo sepas.
Espero que el sabado esteis todos bien para disfrutar de la boda Lara seguro que ira wapisimaaaa ,la verdad es que te leo y me imagino el trajin que te traes entre el trabajo llevar las niñas al cole guarderia casa de tu madre ,no queda otra que tener paciencia y esperar a que crezcan para poder estar mas relajada.
Bicos mil para los cuatro wapa.
Ummmmm que rico,me pido un trozo para la merienda😁
ResponderEliminarHola Cuca!!
ResponderEliminarVeo que tu padre no tiene un huerto sino una plantación jeje
Debe de ser maravilloso tener toda esas hortalizas y frutas recogidas de las plantas y árboles, aunque llegue a cansar un poco. No sabes la de sabor que tiene a comparación de la comprada.
El Brownie veo que se debe de deshacer en la boca. Menudo color y textura que se ve en la foto. Hoy los veganos estarán contentos contigo :).
Besos y espero que el virus se vaya pronto!
Animo Cuca, asi pasa con los peques. Todo bien y de repente le dan a uno sustos, parte del crecimiento. Ojala se repongan todos en casa y que Lara pronto se ajuste a la nueva rutina. Tus brownies se ven de lo mas decadentes y deliciosos, me has antojado mucho. Pero me guardo la receta para mas adelante, que ahora tambien estoy luchando por dejar atras unos cuantos kilos. Pero soy muy debil y hago trampa, me tengo que corregir!
ResponderEliminarBesos
el calabacín le aporta la humedad que lo hará delicioso, lo tego que hacer. Tengo una receta de bizcocho de chocolate con calabacín y es delicioso
ResponderEliminarQue curioso me parece este brouni , esperemos que se pongan todos bien guapa besitos
ResponderEliminarMe encanta la idea! Polyanna colectó 7 kilos de calabacín la semana pasada y no veo como darle salida jajaja
ResponderEliminarMe copio la receta!
Y si cuesta adaptarse a las nuevas rutinas cuando los niños cambian pero dentro de nada ya estaréis del todo acostumbrados! Ánimos!
Besos,
Palmira
Madre mía... Te puedo mandar mi dirección a ver si me llegan algunos de esos calabacines y tanta frutita, nosotros te hacemos la ola. Aunque para serte sincera, me cuesta mucho, mucho, mucho, probar algo que esté hecho con vegetales, porque hasta ahora, las verduras eran mi asignatura pendiente. El calabacin me encanta, y hago una crema de verdura con la Thermomix que quita el sentío y tiene una jartá de verduras. Además he probado el brocoli y ñam!!
ResponderEliminarLuego recuerdo la tarta de zanahoria, la de calabalaza y babeo de lo rica que está. Así que... este brownie me lo apunto!
Animo con los virus. Yo he tenido a la mía con fiebres durante 5 días, con algo de placas, tos y mocos. Parece que ha sido un virus o eso es lo que dicen sus pediatras. En fin.. una locura. Así que te entiendo. Espero que os lo paséis bien en la boda y todos lleguéis sin viruses.
Besotes
Hola Cuca, parece que lo has hecho pensando en mí, porque si le quito azúcar y lo sustituyo, me viene perfecto. Publiqué uno con calabaza y estaba muy rico.
ResponderEliminarTendrás que presentar a tu padre y al de Concha y así intercambiar productos y que no se amontonen. Ojalá yo pudiera. Teníamos calabacines y sé que las plantas dan una barbaridad de frutos.
Espero que la mitad de la familia se recupere y me alegro de que Lara se haya librado. Parece que se hace mayor...
Muchos besos y gracias por el brownie, para mí me lo llevo.
Hola Cuca, la calav¡baza sí que la he usado en muchos dulces y postres pero el calabacín sólo en una mermelada. Me encantaria probarlo, a ver si me pongo a ello. Un beso
ResponderEliminarHola Cuca, que suerte tienes de tener estas verduras ecológicas y que suerte que lo cuide tu padre. Este brownie se ve espectacular, me llevo un trocin y la receta.
ResponderEliminarBesinos
El toque de Belén
Que bien que se ve :-))
ResponderEliminarLa evolución en la cocina nos lleva a alternativas para que todas las personas puedan comer de todo, incluso dulce ;-)))
no se me había ocurrido que no hubiese recetas de brownie, una gran idea por tu parte. El toque del cacao seguro que sería estupendo. Bsts
ResponderEliminarQué original y rico tiene que estar el brownie con calabacín... Besos
ResponderEliminarCon ingredientes de casa...doblemente bueno!!!. Anoto receta!!!. Besines!!!
ResponderEliminarCuca, imagino el agobio para que nada se estropee y poder utilizarlo y bien, claro. El mismo agobio que tuve cuando una amiga me regaló una megacalabaza màs grande y con màs peso que mi perra, la Bimba que pesa 7 kilos... había calabaza por toda la cocina, sin exagerar podía pesar unos 16 kilos. Todo acabó bien.
ResponderEliminarTú brownie se ve divkno y con nueces, mejor.
Nunca he usado la espelta ni el salvado, voy al súper y no se me ocurre. Se me olvida. No soy muy de comprar cosas que no conozca por si las moscas.
Lo de los niños es así, hay que tener mucha paciencia pues no te queda otra. Con resignación. Ya crecerán y te acordarás con nostalgia hasta de esas malas noches corriendo por el pasillo entre cambiar camas y que se sienta mejor. Aprovecha ahora hasta eso.
Lo de la conciliaciones de traca en este país, ¿quién va a pagar las pensiones? si no dejan a las mujeres tener hijos y trabajar al mismo tiempo.
Nunca, jamás se merecerá un empresario ningún reconocimiento público si no consigue que sus empleadas concilien jornada completa, a veces màs que completa contener unos hijos y poder cuidarlos personalmente más horas al día. No sè cuàl será tu caso, pero conozco muchos que son una vergüenza Se creen que con esas estupidas jornadas partidas te hacen un favor y lo que consiguen es que hagas “piernas” de un lado a otro cargada con bolsas y niños. En fin, no por mucho madrugar, se amanece más temprano.
Mil besos y espero que ya no quede ni una miga, señal que era una maravilla de brownie.
Leche con crudités de calabacín, jajajajj... Delicioso el brownie que nos traes, mi próxomo post también es de un brownie vegano. Espero que vayáis recobrando la normalidad en casa y adaptándoos a las nuevas rutinas, después hasta se echan de menos este tipo de cosas
ResponderEliminarUn besito
Me encantan los dulces que mezclan verduras y hortalizas con chocolate. Me parecen super interesantes, y siempre suelen estar taaan ricos!
ResponderEliminarEl brownie tiene pintaza, no te lo voy a negar, así que me apunto la receta :)
Un besote!
Hola Cuca, ya ando por aquí, no he podido venir antes me faltan horas al día.
ResponderEliminarComo te entiendo ya bien sabes que tengo huerto y cuando hay de algo hay a kilos y por mucho que los utilices en diferentes comidas parece que no se acaban, yo hasta le he llegado a decir mi marido otro año no plantes tanto de esto y de lo otro pero nada cada año es igual, tu lo has empleado bien hasta para el desayuno, que no se diga.
Y tiene una pinta que para que, ahora me comia yo un trocito.
Un beso
Hola preciosa! Echaba de menos tus historias del día a día... de verdad que ahora valoro más el tiempo, jajaja. Recuerdo cuando tenía la casa llena de niños y era un no parar, y cuando uno se ponía enfermo era como el dominó, todos caíamos como moscas sin remedio. La naturaleza es sabia, eso hay que pasarlo de joven que tienes vitalidad para eso y mucho más. Ahora paso una noche sin dormir y no soy persona en tres días! Espero que os recuperéis a tiempo.
ResponderEliminarDel brownie qué te voy a decir, que no creo que se note demasiado el aporte de calorías de las nueces, la verdad, y qué más da.. la pinta es fantástica como siempre, niña.
Un beso grande
¡¡Hola Cuca!! Bueno, decirte que estabais guapísimas las tres en la boda, nada que envidiar a las celebritis que van de boda, ¡¡tú más guapa si cabe!! En cuanto al peso, ¡¡estás perfectísima!! Ya quisiera ese peso para mí, que la báscula o se ha vuelto loca, o es que ya no me puedo pasar en nada de lo que como, y me temo que es esto último, aún haciendo tanto ejercicio como hago. Creo que la edad, en mí, me está pasando factura a tope, y bueno, si me quitara algún dulce que otro, también, ja, ja.
ResponderEliminarMe encanta tu brownie, con calabacín, a tope de chocolate y buenas harinas saciantes. Y eso que lo de vegano me sigue tirando para atrás, je, je, perdón a los veganos si leen el comentario. Pero valoro un buen postre, sea vegano, hipercalórico, vegetariano o lo que sea, porque si está bueno, lo está.
Lo que no sé es de donde sacas tantas ideas para hacer con el mismo producto. Es verdad que llega a suturar cuando siempre ves lo mismo en el frutero, pero también se valora mucho que sea del huerto de tu padre y que cultiva con tanto amor, pues que al final, te pasas comiendo toda la semana lo mismo, con un pequeño suspiro y sin rechistar.
Espero que ya estén todos bien en casa, y que nos cuentes un poquito la boda este jueves, a ver qué tal se le dio a Lara llevar las arras, seguro que lo hizo de 10. Besitos.
Esa masa se convirtió en un rico brownie yo si que tengo hecho bizcocho y aunque mis calabacines no sean tan frescos me haré de todos todos modos un rico brownie. besinos
ResponderEliminarQué pena que ya no tenga calabacines, pero queda apuntada para hacerla el año que viene.
ResponderEliminarMuy rica.
Un beso.
Hola Cuca, es una gran suerte tener huerto propio y disfrutar de lo que nos trae cada temporada. Nosotros teníamos en el Pirineo, pero ya ... las circunstancias de la vida, falta mi padre y no es lo mismo.
ResponderEliminarEl brownie es una delicia, y tiene que estar super rico con lo que lleva. A mi me encantan las verduras y me lo imagino delicioso. Gracias por la receta. Un beso:)
Ahora que lo he cogido el punto a usar el calabacín en repostería tengo que probar esta receta Cuca que tiene una pinta increble.
ResponderEliminarLa hermana de una amiga de mi hermana tiene una huerta y le da cosas a sus padres, pero son tantas que ellos le dan una parte a la amiga de mi hermana que como vive sola nos da muchas cosas a nosotras, son las verduras viajeras jajajajaj
El brownie no lo he preparado, pero hice un bizcocho de calabacín y chocolate y nos gustó muchísimo!! así que imagino como debe de estar esta tuyo!! Y si encima los calabacines son de cosecha propia mucho más ricos!! Bs.
ResponderEliminar¡Hola Cuca! Me encanta tu brownie... ya sabes que a mi me vuelven loca, asi que no tengo problemas de que nos llenes de brownie tu cocina... yo estaré esperando y babeando también por un cachito jajaa...
ResponderEliminarY que susto con la peque vomitando y mas justo con su primer día de pescado... no me quiero ni imaginar el mal rato que pasaste...
Bueno..sigo leyendo la receta siguiente, que tengo que ponerme al día, después de tanto rebujito jaja... Besos.
Hola! que rico se ve ese brownie!! en bizcocho si que habíamos comido el calabacín pero en brownie no por lo que nos ha sorprendido un montón al vértelo! Esperamos que ya estéis todos recuperados! besis
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