Red Velvet Cheesecake. Tarta de queso Red Velvet (terciopelo rojo).
El domingo se celebra San Valentín.
Menuda exclusiva pensaréis.
Y lleváis toda la razón.
Entre la publicidad de las tiendas y los blogs y las redes sociales teñidas de rojo y cargadas de corazones a ver a quién se le pasa.
Así que yo me subo a la estela del empaño "sanvalentinero" con esta tarta de queso que lo tiene todo: color y forma.
Y aprovecho para repetir que a mí este día no me gusta.
Que sí, que ya sé que con la que está cayendo cualquier motivo para celebrar es bueno (guardando siempre las distancias, respetando el aforo y el blablabla que sólo cumplimos algunos, los temerosos del condenado virus) pero aún así sigo sin verle la gracia al día en cuestión.
Me reitero cuando digo que me parece un día cruel.
Cuando yo estaba en el instituto era la excusa perfecta para reírse de algunos compañeros. Ahí estaban los graciosos de turno que se dedicaban a mandar cartitas al compañero callado, al que se relacionaba poco con el resto, al que no encajaba en los estándares de belleza.
Que yo no sé dónde le veían la gracia porque ninguno se creyó jamás que aquellas cartas fueran "de verdad" menos aún cuando el tonto de turno estallaba en carcajadas cuando llegaba el momento de repartir en el aula las cartas y flores que se enviaban en secreto.
Desconozco si se sigue con la práctica del envío de cartas y flores por San Valentín en mi instituto. Tampoco sé si se hace esto en otros centros. Se ideó como una forma de contribuir al viaje de estudios, pero a mí siempre me pareció una chapuza de idea y una actividad que daba pie al abuso.
Sin olvidar a quienes no tienen pareja y estarían encantados de encontrar a alguien pero las relaciones se les resisten. Pues no necesitan precisamente este día ni al impertinente de turno preguntando ¿oye y tú cuando te vas a echar novio? y si acompaña la coletilla "es que se te va a pasar el arroz" ya es para darles con la mano abierta.
Y no entro en criticar lo comercial del asunto porque ¿qué no es comercial a estas alturas? navidades, día del padre o la madre, cumpleaños, aniversarios... mires donde mires la intención final es incurrir en el gasto y mover la economía.
Cosa distinta es que te dejes o no arrastrar por la corriente y caigas en la tentación de comprar.
O igual eres sólo de celebrarlo.
O crees que es la excusa ideal para permitiros una escapada. Que no es que sea necesario, pero como en otro momento no ves la ocasión es "vuestro" momento. Porque sí, por tener una excusa. Sin más.
Yo lo veo todo bien.
Respeto al que no le gusta.
Al que le gusta y lo celebra en casa.
Al que lo celebra fuera.
Al que gasta.
Al que no gasta.
Al que critica pero cae en la tentación.
Al que calla y se resigna.
Al que salva la temporada con este día.
Estoy por respetar hasta aquel que está más pendiente de si el de al lado tiene pareja que en buscarse una o estar pendiente de su vida. Y casi lo consigo, pero hoy no ha podido ser.
Vivir y dejar vivir, que así el mundo fluje.
Y para quien quiera celebrarlo aquí va mi propuesta casera, sencilla y deliciosa.
Y un poquito vistosa también, porque este color entra por los ojos.
Y cuando la pruebas estás perdido.
En mi casa con una tarta de queso el éxito está asegurado. Y si encima entra por los ojos ¡dura un suspiro!
La idea de este postre surgió el pasado año en plena pandemia, o casi a las puertas, cuando la vi publicada en una cuenta que sigo.
Rastreé hasta el origen de la receta y me topé con una cuenta en inglés que no conocía pero que me fascinó.
Así que empezó mi labor de rastreo de la receta, traducción, adaptación ¡et voilá! esta es mi versión.
Las recetas que encontré llevaban casi todas una cobertura blanca, la mayoría de nata, de la que he prescindido.
En la elaboración os dejo una cobertura de queso (sí, llueve sobre mojado) que me convence más (no se nota apenas lo poco amiga que soy de la nata montada) pero que yo no puse porque me gustaba más al natural, para que se viera el color.
Esta tarta de queso cayó en medio de la pandemia para el día de la madre.
Estábamos confinados, nadie salía de casa y nada se podía celebrar, pero eso no era impedimento para disfrutar de un postre rico y bonito ese día que pusiera color a esos días tan grises y tan tristes para todos.
La elección fue todo un acierto.
Recuerdo la cara de sorpresa de Lara al verla, sobre todo el color y la forma.
Son tan fáciles de impresionar, tan pequeñas, que todo les hace ilusión.
He de reconocer que la elección del molde no fue fortuita.
Una que siempre tiene la mente funcionando para traer material a blog pensó que si la hacía en el molde de corazón tendría una receta ideal para San Valentín.
Y aunque ha tenido que aguardar en borradores casi nueve meses ha llegado el momento de que vea la luz y llego a tiempo de traeros una idea sencilla y rica de celebrar (o no) San Valentín el domingo.
Ya os he comentado lo de la cobertura.
Y no sólo he pasado de ella porque me parece innecesario añadir más calorías, por muy bonito que haga el contraste.
He querido enseñar la tarta "a cara lavada" para que veáis que la superficie no se agrieta pero se dora.
Si todas las tartas de queso adquieren durante el horneado un color dorado en la superficie esta no iba a ser diferente.
Pero aquí el dorado torna el color rojo en marrón, como si llevara chocolate en el centro que es lo que pensó mi marido.
Con la cobertura no se hubiera visto, pero a mí me encanta ser clara y contar lo bueno y lo malo de cada postre.
Creo que nunca he abierto el horno con una cheesecake dentro salvo casi al final para agitarla para comprobar el punto de cocción del centro.
Igual se puede tapar para evitar que se dore en exceso sin que acaben saliendo grietas en la superficie. Si alguien lo ha hecho por favor que me lo cuente en los comentarios.
La tarta es bastante cremosa y el vinagre, que se emplea para contar la nata, le da una textura bastante interesante. A mí al menos me ha gustado mucho y espero seguir probando en futuras tartas de queso.
La combinación con las galletas Oreo me encantó y creo que estéticamente queda muy bien. Pero si no os gustan estas galletas podéis usar otras o una base a vuestro gusto con frutos secos, cereales...¡lo que se os ocurra!
Para mí fue la manera perfecta de dar salida a unas cuantas galletas Oreo que eran demasiado peligrosas en el armario y un resto de colorante rojo que no me acuerdo de cuánto llevaba ahí.
Pero esto es cuestión de gustos y de lo que se tenga en casa.
Aunque no soy muy amiga de colorantes, reconozco que tengo debilidad por el rojo y que tengo muchas recetas pendientes con él.
Porque la tarta Red Velvet aún no ha llegado a mi cocina, pero sí en versión tarta de queso ¡si es que no tengo remedio y son mi debilidad!
A ver si este año me pongo las pilas, me centro y voy haciendo recetas que llevan mil en mis pendientes.
Poco más queda que añadir. Espero que la receta de hoy os haya gustado y que no estéis muy empachados de rojo y corazones, que es lo que más se prodiga estos días.
¿Alguien se apunta a un buen trozo?
Para la base:
* 20 galletas Oreo
* 25 gramos de mantequilla o margarina
Para el relleno:
* 160 gramos de azúcar
* 250 gramos de nata para montar (min. 35% m.g.)
* 800 gramos de queso de untar (no light)
* 4 huevos
* 1 cucharadita de vinagre (yo he puesto vinagre de arroz)
* 12 gramos de cacao en polvo
* Una cucharadita de vainilla (opcional)
* Una cucharadita de vainilla (opcional)
* Colorante alimentario rojo
Cobertura (opcional)
* 200 gramos de queso de untar
* 85 gramos de azúcar glas
Elaboración:
1. Para preparar la base trituramos las galletas Oreo (con el relleno) hasta dejarlas reducidas a polvo y le añadimos 25 gramos de mantequilla derretida. Mezclamos bien y vertemos dentro de un bol desmoldable. Extendemos por la base y aplastamos con un rodillo, con las manos o con el dorso de una cuchara para dejar nivelada y compactada la base. Reservamos:
2. Para preparar el relleno ponemos en un bol amplio el azúcar, la nata y el vinagre y mezclamos bien.
3. Añadimos el cacao y vamos poniendo el queso de untar de 200 en 200 gramos y batimos en cada adicción lo justo para integrar.
4. A continuación añadimos los huevos de uno en uno y batimos en cada adicción. No añadimos el siguiente hasta que el anterior no esté integrado.
5. Por último añadimos colorante rojo hasta obtener el tono deseado.
6. Vertemos la mezcla en nuestro molde e introducimos en el horno precalentado a 170º C
7. Horneamos de 60 a 70 minutos o hasta que al agitar el molde veamos que el centro queda un poco tembloroso. Apagamos el horno y dejamos dentro la tarta otros sesenta minutos.
8. Cuando apaguemos el horno pasamos un cuchillo o una espátula por el interior del molde y cerramos rápidamente la puerta.
Así conseguimos que la tarta se suelte de los bordes, se rompe la tensión de la superficie y no se agrieta al bajar.
9. Pasada la hora, sacamos del horno y dejamos enfriar por completo sobre una rejilla. Tapamos con film transparente ¡y al frigorífico!
Si optamos por preparar la cobertura antes de servir mezclamos el queso (frío) con el azúcar, desmoldamos la tarta y cubrimos la superficie.
Ni qué decir tiene que como buena tarta de queso está mejor cuantos más días pasan.
Si no tenéis colorante no pasa nada, siempre podéis prescindir de él porque aparte de tono no aporta nada al postre, aunque hace muy bonito, de eso no cabe duda.
Al menos si os gusta el color rojo tanto como a mí.
Y por supuesto podéis usar el molde que tengáis en casa, no tiene por qué ser de corazón, y convertirlo así en un postre para cualquier celebración.
Esta receta va para el reto 1+/-100, desperdicio 0 de mi amiga Marisa por ser ideal para acabar con un resto de galletas Oreo y por poner fin a mi bote de colorante rojo tal y como os contaba al principio
Celebréis o no San Valentín espero que la receta de hoy os haya gustado.
Y sobre todo espero que sigáis sanos, que ahora mismo es lo más importante.
Me despido de vosotros sin novedades de las peques, que ya es bastante tener cierta normalidad en la época que vivimos.
Nos leemos la semana próxima, mientras tanto gracias por seguir visitando este rinconcito y sed felices.
Manos a la masa y ¡bon appétit!
Hola Cuca!!
ResponderEliminarQue maravilla de pastel, pues claro que hay que celebrar aunque sea como tiene que ser con los de casa, por lo menos recordamos fiesta, yo no prepare nada, esta temporada estoy un poco baja de moral, pero todo volverá a ser como siempre y habrá que poner entusiasmo a la vida. El pastel tiene que estar delicioso, que pintaza....Besss
Hola Cuca, es un día que siempre trae controversia, a mi no me molesta, y tampoco había pensado en estos detalles "crueles" que cuentas, la verdad, ni se me ha ocurrido nunca gastar una broma pesada así, ni la he sufrido, ni la he visto, supongo que he tenido suerte.
ResponderEliminarYo respeto todo, como tú dices, pero siempre que oigo a alguien decir que es un día comercial y que "lo importante es celebrarlo cualquier día del año", descubro que detrás de esta frase se esconde alguien que se le olvida hasta felicitarte por tu cumpleaños
Tanto los que alardean de los regalos como los que dicen que "son detallistas el resto del año" me parecen dignos de aplicar el refrán de "dime de que presumes..."
A mi no me hace falta que me regalen nada por San Valentin, pero oye... si me despiertan con un beso y me dicen "felicidades cariño", se me abren las carnes jajajaja.
Y con tu tarta de queso también se me abren, y el estomago, y comienzo a salivar jajaja, porque menuda pintaza, y como dices... las oreo ya lo bordan
A mi me pilla eltoro, no tengo nada preparado!! valgame
Besos guapa!
Hoy roja Valentín. Claro que toca una tarta de corazón sangrienta. Yo soy de celebrar lo que sea y en la forma que más nos guste, ¿en casa? Pues en casa, con un dipeo, un vinito y una peli del Netflix, pero tanto rojo me hace daño a los ojos, tu tarta me la como sin el colorante mejor. Por aquí los comercios están cerrados, como no brille la imaginación, no se yo, quizás sea bueno por eso, vamos a encontrarle la parte positiva, que últimamente quiero hacerlo en todo para no pensar en negro. Felicidades por tu tarta y por celebrar el día del amor y la amistad, que ahora la cosa es más amplia, de la mejor manera, con tu alegato y con tu red velvet cheesecake. San Valentín está flipando.
ResponderEliminarBss
Una tarta deliciosa y colorida para celebrar el día , aunque no se sea muy afín a la susodicha fiesta, a un dulce nunca se le dice que no ja ja.
ResponderEliminarYo suelo tapar con papel la tarta de queso si veo que se está arrebatando porque es lo que tienen, en un segundo que te descuides , enseguida toman más color de la cuenta.
Que disfrutes del día en cuestión y sea como sea, que viva el amor siempre , cualquier dia del año expresemos lo que sentimos que nunca está de más.
Un abrazo Cuca.
La tarta se ve muy bien :-)))
ResponderEliminarEs una fecha consumista por eso no gusta.
1 saludito
Hola Cuca ! a mi este día no me molesta , si hay que celebrar se celebra y si no ..pues tampoco pasa nada ,estamos en una situación que cualquier cosa para celebrar es bienvenida y si es con esta tarta tan llamativa mejor que mejor
ResponderEliminarbesitos
Hola Cuca, deliciosa y visualmente atractiva esta tarta Red velvet, te quedó espectacular. Ya imaginarás que pienso exactamente lo mismo que tú, no me ponen nada tanta fecha especial para regalar, pienso que si quieres a alguien no tienes que esperar un día concreto para celebrarlo, pero la sociedad es cruel y te puedes pasar todos los meses haciendo cosas especiales que como llegue el 14 de febrero y no hagas nada , seguro que llega la amiga primorosa y te restriega el regalo que recibió de su chico, y lo peor esa mirada compasiva cuando le dices que a ti ya te regalo tal cosa el mes anterior. Si yo respeto a todos pero odio estas fechas preestablecidas. Un cariño grande mi chiquilla.
ResponderEliminar¡¡Hola Cuca!! A mí me encantan ver los postres temáticos, sea San Valentín, Navidad o lo que sea, y por esto también me apunto al carro de hacer postres y cosas relacionadas según qué fechas sobre todo para el blog, para eso lo tenemos, para hacer postres de otoñales en otoño, postres navideños en navidad y todo eso, nos hace ser menos monótonos en la temática del blog y ayuda. Otra cosa es que celebremos o no luego en casa. En mi caso no nos compramos nada, bueno, mi marido siempre llega a casa con dos rosas, este año no será, es domingo y tenemos las tiendas más cerradas que abiertas, pero no hay problema. Pero vamos, que si viene un San Valentín con un pedazo regalo, tampoco me molestaría, ja, ja, todo me va bien.
ResponderEliminarLo de tu instituto es que tiene tela, la verdad, esas crueldades, por fortuna, en los míos (siempre tuve que ir a diferentes colegios e institutos), no pasaban esas cosas. Pero tienes razón, es un día cruel, sobre todo para quienes echan al ver estas cosas, yo nunca pensé si estaba sola o acompañada en San Valentín, siempre ha sido un día más y a la vez un día de celebración, ya sabes, lo he contado alguna vez, es el cumpleaños de mi hermana, la de tu edad, la que va detrás de mi y siempre lo hemos celebrado, este año va a ser el primero que no lo haremos.
Bueno, voy con tu tarta que me ha encantado. He probado y hecho en casa la red velvet, pero nunca de esta manera, en formato cheesecake, ¡qué maravilla! Con lo que me gustan las tartas de queso en todos sus formatos. Me encanta ese color rojo también. Me llaman mucho la atención los postres de colores, aunque también intento no abusar de ellos, el colorante es laxante y tengo que tener cuidado, los que tienen mucho, me cuesta ir al baño varias veces, ja, ja. Pero reconozco que me gustan verlos. Bueno, a mí es que me encanta ver postres, es algo de lo que no me cansaría, me das un catálogo de postres y me quedo mirándolo como si estuviera viendo cuadros de Velázquez, ja, ja. Tiene que estar muy rica esta tarta, de verdad, con ese tostado en el centro, que parece ser una parte más profunda del corazón, ha quedado muy atractivo.
Bueno, aunque no celebréis San Valentín, espero que sí celebréis que sois una familia llena de mucho amor. Besitos.
Una tarta preciosa, elegante y con ese color, llama a la mirada, se ve que esta deliciosa. En Mexico celebramos el dia del amor y la amistad para no dejar fuera a nadie, pero como bien dices: Vive y deja vivir, cada quien sabe si lo celebra o no. Para mi las celebraciones son un pretexto de cocinar algo rico y hacer un dia especial para mi familia, a mi me encanta!
ResponderEliminarBesos
Hola Cuca. Por fin llego. Entre unos líos y otros, médico y setenta lavados de mano, ropa, pelo... menudo día.
ResponderEliminarNo participo, ni publico nada para S. Valentín y comparto lo que dices, respeto a todos y nada que objetar a que el consumismo está tan instalado, que quien no quiera unirse y controle, tampoco está obligado.
Me centro en tu tarta que es preciosa y no dudo que un éxito en tu casa, más, sabiendo que la hiciste en pleno confinamiento. Es otra tarta de las muchas que ya tienes publicadas y que disfrutáis porque os encantan. Lara se quedó boquiabierta, no sé si la probó, igual Elena sí.
El color es precioso y te ha quedado perfecto.
Me la quedo con todos los honores en 1+/-100, ya sabes que es un placer tenerte.
Te he enviado un correo, sé que vas liada, pero si te apetece y puedes, me encantará tenerte.
Un beso enorme.
Hola Cuca. Una tarta espectacular para celebrar ese día en el que al parecer todo el mundo tiene que festejar. Que cada cual haga de su capa un sayo y el que lo quiera celebrar que lo haga y el que no pues lo mismo.
ResponderEliminarHay mucha gente que parece que no viven si no celebran algo, están en su derecho, al menos hasta ahora, luego ya veremos.
Y ya veo que coincides conmigo al decir que este día no te gusta, menos mal que somos dos así al menos estamos algo más protegidos jj.
No voy a decir que es un día comercial ya que posiblemente alguien me tachará de repetitivo, pero es lo que pienso, tampoco voy a decir que hay que demostrarlo no solo en un día sino a lo largo del resto del año porque también alguien pensará que es humo pero allá cada cual con sus pensamientos.
Y el mío ahora está en esta tarta que, independientemente de la forma, dicho sea de paso y a tiempo, es ideal para el día en cuestión tiene que resultar una delicia para el paladar. Además le has dado un color tan llamativo que nadie en su sano juicio dejaría de probar esta maravilla tanto celebre el día como no. Yo lo celebraré a mi manera, eso sí sin que falte una copa de cava jj.
Que pases un feliz día de San Valentín y por ende un buen fin de semana.
Un abrazo.
Yo tampoco soy de San Valentín, nunca lo he sido, y a día de hoy tampoco lo celebramos, nos parece una fecha de puro consumismo, porque no es mucho mejor demostrarse el amor día a día?! en fin, que allá cada uno con su vida y sus historias, y bienvenidas todas! :)
ResponderEliminarLa tarta te ha quedado fantástica, y yo que soy una loca de las tartas de queso, tengo que decirte que me ha parecido muy original, de hecho, tengo algo similar, aunque muy diferente, para el día de los enamorado en los borradores, jejeje...
Un abrazo Cuca!
Cuca yo paso de celebraciones impuestas a base de hacernos creer que si no regalamos o recibimos un regalo, estas fuera del círculo, esto no implica que no sienta que el amor haya que festejarlo, solo que yo lo hago a diario, pero mira tú, que no sé porqué, precisamente este año, será la necesidad de besos y abrazos de nuestros seres queridos, a excepción de mi santo, que ese sí que lo tengo asegurado, Jajajaja..., Pero es que este año me apetece ver corazones , besos y abrazos por todos lados, y en esto de bloguear no hay pandemia que nos impida mandarnos besos y achuchones en cantidades industriales, Jajajaja..., así que sí, bienvenida sea tu red velvet y Bienvenido sea San Valentín.
ResponderEliminarUn millón de besos y feliz día de San Valentín ¡Ea! He dicho y punto...Jajajaja...
Hola Cuca, qué mona te ha quedado, en color y forma super amorosa. Tiene que ser una delicia de tarta. Para San Valentín yo no suelo hacer nada especial ese día. Muchos besos!
ResponderEliminarCuca, qué bonita te ha quedado la tarta, yo también pensé que el centro era de chocolate, te ha quedado de lo más vistosa sin cobertura. Estas celebraciones son muy polémicas, al igual que la Navidad, hay quien le gusta y otros que no. En Venezuela somos un poco más más democráticos y hablamos del día del amor y la amistad, tratando de abarcar a solos y acompañados jaja.
ResponderEliminarSea que celebres o no, te deseo un fin de semana de felicidad junto a tu marido y familia. Me llevo un trocito de cheesecake.
Besos, cuídate mucho!
Un corazón rojo y palpitante!!
ResponderEliminarQueda muy bonita!! Y si es de queso aún me gusta más.
Yo si que le celebro este día, pero sin regalos. Simplemente una cena a la luz de las velas :)
Besos
Hola has tardado un embarazo pero por fin llegó el día ¡jajaja! ha merecido la pena ¡qué bonita tarta de queso!
ResponderEliminarTe diré que al verla, rápidamente he pensado en tarta de queso, y así ha sido. Se aprecia un corte muy firme y seguro que quedó deliciosa.
A mí también me chiflan las tartas de queso pero no hago muchas horneadas.
Te quedó un color muy bonito e imagino cómo le gustaría a tu madre y a las peques, bueno y a todos la que la probaron.
Feliz día. Es importante celebrar todos los días del año, y cómo dices, dejar que todo fluya, es lo más inteligente.
Y los niños pueden ser muy crueles con otros compañeros, esto por desgracia creo que aunque pasen años y años no cambiará. En fin, eso es otro tema...
Nosotros tampoco nos hacemos regalos pero podemos hacer alguna comida o postre especial, eso sí.
Feliz finde a los cuatro.
Te ha quedado preciosa y tiene una pinta buenísima.
ResponderEliminarSaludos
Olguis.
Hola Cuca no soy de celebraciones comerciales, pero sin embargo me gustan las celebraciones tradicionales y nuestras, me gusta ver alegría sobre todo ahora en estos momentos que estamos viviendo necesitamos ver colores ,flores...cualquier cosa que transmita alegría, tu tarta es una auténtica invitación ❤ te deseo un feliz fin de semana besinos
ResponderEliminarYo quiero un trozo....... yo también he caído en hacer una tarta para ese día muy roja de fresas......
ResponderEliminarTe ha quedado una tarta para S Valentín o cuando más te apetezca ,y la forma de corazón siempre es bonito
Y se ve totalmente deliciosa
besitos¡¡
El día de la madre, también es una gran festividad para demostrarle nuestro cariño y agradecimiento a tantas madres que lo han dado todo por sus hijos.
ResponderEliminarEl amor y la amistad son dos maravillosos sentimientos a los que no solo hay que dedicarles un día, sin bombo y sin platillo deberíamos hacerlo día a día y de alguna forma sí que lo logramos aunque no nos demos cuenta, a la larga, obtenemos la recompensa, te hablo por experiencia.
Y nada mejor que esa tarta de queso para la alegría de la familia, la verdad es que imana los ojos y ¡claro que me la comería!
Te dejo cariños en un abrazo.
Kasioles
Te ha quedado una tarta muy bonita y seguro que muy rica.. Besos
ResponderEliminarAy, como me suena lo que cuentas del instituto. A nosotros en clase de euskera con 12 o 13 años nos hacían mandar una carta a modo de practica para la redacción, cosa que me parece bien sino fuera porque nos obligaban a mandarla de verdad lo que hacía que se convirtiera en una competición ver quien recibía más cartas y reírse de los que no recibíamos ninguna. Creo que eso, entre otras cosas, hizo que cogiera tanta manía al euskera y a la fecha en si.
ResponderEliminarLuego en Lanzarote, en Bachiller, sí que nos mandábamos rosas de papel para pagar algo de carnavales, pero al ser más mayores era algo más entre amigos y era divertido. Al igual que Sant Jordi en Barcelona que siempre nos regalábamos una rosa entre los amigos.
En fin, pero seguro que con este cheesecake seguro que me volvía a gustar San Valentín porque tiene una pinta riquísima :)
hola Cuca, guste o no el día, a mí si me gusta poner algún detalle en la mesa para hacerlo diferente y celbrar el amor.. ¿Por qué no? ültimamente se celebra el día de la patata, del pan, de la croqueta de la tortilla, ja ja ja ja!! Pues bienvenido sea San Valentín, sobre todo si esto hace que nos prepares una tarta tan deciosa, colorida y tan bonita. Un beso!!!
ResponderEliminarVaya!, me encantan las tartas de queso y está además ha quedado preciosa y apropiada para el día de San Valentín. A mi en casa me gusta celebrarlo todo y por supuesto San Valentín, me ha extrañado cuando decías que la considerabas una fiesta cruel, he seguido leyendo y lo he entendido, no sabía yo de esas costumbres, nunca me ha gustado la burla gratuita ni el ofender los sentimientos e los demás, sobre todo cuando te amparas en el anonimato. Un beso
ResponderEliminarAunque ya se pasó, feliz día de san valentin, con esta maravilla seguro que todos se han enamorado como yo ummm.
ResponderEliminarEl colorante le da un puntazo increible y el vinagre a mi también me encanta, esa sensación de buttercream es un puntazo
besitoss
Mi querida amiga me pasa como a ti no me vuelve loca este día pero eso no tiene nada q ver con está rica tarta q te ha quedado de cine con un color divino y seguro q un sabor más rico aún Espero q estéis todos bien y q mis princesitas estén creciendo dices eso no me cabe duda A pesar de estos malos tipos en fin ya vendrán mejores Mil besicos preciosa
ResponderEliminarNosotros tampoco celebramos San Valentín Cuca, es más ya no celebramos ninguna de las fechas que conmemoran la amistad que en Colombia es en septiembre y se llama día de amor y amistad, por ende los amigos entran y no es solo para enamorados (cosa que concuerdo contigo y lo que dices). Ya no vivimos en mi tierra natal y por ello pues no celebramos y acá se celebra día de enamorados en junio que tampoco celebramos, jajajajaja. Este año justo ha caído un domingo y traje un postre rojo que fue nuestro postre de 25 de diciembre. Como sea, me gustan los corazones, me gustan los colores que remiten al amor, el amor que se celebre siempre en todas sus dimensiones ese es el amor que me gusta. Y como todo se respeta, para mi el día de enamorados que siempre celebro sí o sí es mi aniversario de boda. Pero bueno voy a tu receta, que me encanta como te ha quedado el corazón, que el amor viva siempre en todos, la parte dorada parece otro corazón también, da un efecto lindo. Inicialmente pensé que llevaba remolacha, jajajajjaa, nunca he preparado red velvet, me gusta la idea de tarta de queso (somos ratonas felices por siempre), también me parece así tal cual perfecta, que aunque la nata no me molesta, creo que a una cheesecake como la que le diste a tu madre pues esta más que perfecta así tal cual, no le hace falta nada más, se ve tan cremosa que me encanta, lo único es que cambiaria la base, (en casa somos raritos, no nos gustan las oreo jajajajajaja). Bueno mi querida Cuca, te dejo un abrazo, ha valido la pena la espera de compartir este dulce corazón para este día para llenar las cocinas de muchos corazones e ideas dulces como para aniversarios, cumpleaños especiales, días de amor y amistad, días de madre, en fin.... Besos y me llevo mi buen trozo !!!!!!!
ResponderEliminarYo no celebró San Valentín, pero me parece una idea estupenda para celebrar cualquier cosa, incluido San Valentín si se celebra. Alguna vez me ha pasado que una entrada me da un poco de rabia y la tengo en borradores meses... Un beso grande, guapa
ResponderEliminar¡Hola, Cuca!,
ResponderEliminarMuchas gracias por darme a conocer tu blog *.*. Desde luego, me voy a llevar unas cuantas recetas apuntadas ;), porque se me hace la boca agua solamente de ver estos postres y dulces tan deliciosos. Mi lado goloso está feliz. Jejejejeje.
En este caso, sé que disfrutaré mucho de este porque nos encantan las tartas de queso por aquí y tiene una pinta... A ver si puedo probar pronto tu receta ;)
Muchas gracias por compartirla.
Me quedo por aquí.
Un besito de tinta y hasta pronto :D
Que bonita tarta me encanta cielo
ResponderEliminarBesos
Que bonita tarta me encanta cielo
ResponderEliminarBesos