Pastel turco marmolado de yogur y mermelada de cereza
Nos guste o no el calor ha llegado y con él sus cosas típicas : los días casi eternos, los niños jugando en la calle hasta que se hace de noche, las ventanas abiertas, buscar la acera con sombra, los abanicos en el bolso, los temidos modelitos de verano (que con la excusa de ir fresquitos algunos van disfrazados) el final del curso escolar (y el a ver qué se hace con los niños cuando los padres trabajan) el contar los días que nos faltan para tomarnos unas vacaciones que invariablemente siempre nos saben a poco, los negocios que empiezan a colgar el cartel de cerrado por vacaciones...
Por muchos años que pasen los veranos siempre son iguales. Reconozco que a mí me cuesta un poquito hacerme con los días con tantas horas de luz. Parece que es temprano y sin embargo cuando quieres darte cuenta es tardísimo. Las tardes parecen eternas y ya no se te ocurre qué hacer para entretener las horas y ahora con la niña es incluso peor porque con tanta luz fuera a ver cómo la acuestas...
De corazón os digo que los días no han terminado de alargar y ya estoy deseando que empiecen a acortar las horas de luz.
Cuando era estudiante estaba deseando que llegase el verano para descansar y hacer lo que me gustaba pero al cabo de dos o tres semanas estaba tan aburrida de descansar, leer, ver la televisión (entonces no había internet ni móviles) salir a veces a la calle con mis amigas (que mi padre no me dejaba ser una niña callejera y estar todo el día por ahí) que ya no sabía qué inventarme para llenar las horas de un verano que se las prometía casi eterno.
Entonces llegaba mi madre y soltaba eso de "si tan aburrida estás coge un trapo y ponte a limpiar el polvo" ¡horror! ¡¿para qué había dicho nada?! y quien dice limpiar el polvo dice limpiar cristales o fregar los azulejos del cuarto de baño...
Otra de las frases favoritas de mi madre era "vente a la cocina y échame una mano" y después todo el rato con el sermón " te vas a hacer una mujer y no vas a saber ni freir un huevo" ¡no os podéis hacer una idea de lo que odiaba aquella cantinela! y yo mientras pelando cebolla, ajos, tomates, zanahoria... para hacer un sofrito (que más de una vez se me quemaba por falta de interés y atención) o para hacer gazpacho o salmorejo o lo que mi madre decidiera que se comía aquel día.
Os prometo que salí de mi casa para estudiar en la universidad y no había hecho una comida por mí misma creo que nunca (salvo pasta algún día) pero la sorpresa fue mayúscula al descubrir que después de diez o doce años de los eternos veranos en la cocina pelando verduras sin ganas ni vocación a fuerza de ver a mi madre poner lentejas, potajes, preparar arroces... tenía más que claro cómo se hacía cada comida y a fuerza de pruebas, fracasos y algún acierto se me fue metiendo el gusanillo de la cocina y hasta hoy.
Ya podemos dar por bien empleados esos veranos y la cantinela de mi madre que supongo más de una madre habrá repetido también y que yo temo repetir con Lara
La receta que os traigo no sabía si publicarla ya o esperarme unos meses. Por un lado empieza a hacer mucho calor como para animarse a encender el horno (aunque yo sigo horneando todas las semanas aunque tengamos 40º a la sombra) y además hace bien poco que publiqué la receta de mi adaptación del Pastel turco de yogur de Gordom Ramsay de la que deriva esta que os propongo hoy.
Pero por otro lado estamos en temporada de cerezas y me parecía propicio publicar la receta por si os decidís a preparar mermelada que tengáis una tartita deliciosa y muy sencilla de preparar para aprovecharla.
Además no sé si este año voy a poder preparar alguna receta más con esta fruta que tanto me gusta pero que necesita de tiempo para poder deshuesarlas y con Lara pululando por la cocina no siempre es sencillo disponer de demasiado tiempo para preparar nada.
Tampoco está siendo una cosecha demasiado vistosa y aunque a mi casa han llegado algunas cerezas aceptables (regalo de algunos vecinos de finca) en el mercado estoy viendo cerezas caras y no demasiado buenas y es una lástima.
Hace mucho tiempo que quería preparar algún postre con efecto marmolado y nunca me atrevía. Al igual que me pasaba con la charlota el principal motivo era el miedo. Temía que las masas se mezclaran y acabara todo con un color "sucio" y poco definido.
Ojalá todos los males fueran ese porque independientemente de que las masas se mezclen o no el sabor iba a ser bueno pero yo ahí sin lanzarme ¡el que no arriesga no gana!
Tras muchas vueltas decido que empiezo por este pastel, que ya cuando lo hice en invierno mi intención era esta pero me arrepentí en el último momento, en lugar de hacerlo por un bizcocho o unos muffins que serían más sencillos de manejar ¡y sorprendentemente me ha salido bien!
Y digo sorprendentemente porque como la adaptación es mía. He sido yo la que acertada o erróneamente he ido decidiendo en cada momento qué hacer o cómo ir vertiendo la masa por tanto que haya salido bien y vistoso ha sido más cuestión de azar que otra cosa.
Y así ya me he quitado la espinita y espero "marmolear" más postres ¡acabo de abrir la veda!
La verdad es que la mermelada de cereza no se nota en exceso en el sabor pero le da un color tan bonito que ha merecido la pena el experimento. Para aprovechar la que quedaba en el bote le ponía un poquito por encima a cada trocito en el momento de servirlo y así se pontenciaba el sabor.
Si no tenéis mermelada de cereza ¡no hay problema! cualquier mermelada de color intenso (arándanos, frambuesa, fresa, frutos rojos...) os servirá. Y os digo que sea de color intenso porque al mezclarla con el yogur el color se diluye y aclara considerablemente. En este caso podemos hacer uso de un colorante alimentario o dejarlo tal cual haciendo gala de un tono natural ¡eso a vuestra elección!
El resultado es una tarta fresquita y ligera que no empalaga y es muy sencilla de comer ¡peligro! que a lo tonto pueden caer dos trozos y aunque igual ya no nos da tiempo a llegar a la operación biquini con dignidad tampoco es cuestión de aumentar impunemente las lorzas de nuestra propiedad.
A simple vista parece una tarta de queso ¡todo el mundo lo piensa! e igual si no decimos que sólo lleva yogur no lo notan porque hay tartas de queso que llevan más cantidad de nata y de yogur que del propio queso y por tanto apenas se diferencia su sabor.
Para ser el primer marmolado que preparo creo que no ha quedado mal ¿verdad? Todo es mejorable, no cabe duda, pero estoy contenta.
¿Os apetece un trozo mientras os cuento la receta?
¡Vamos con ella!
Ingredientes:
* 600 gramos de yogur griego natural
* 6 huevos
* Un limón grande
* 125 gramos de azúcar
* 200 gramos de mermelada de cereza
* 100 gramos de harina
* Una cucharadita de levadura química
* Colorante rojo (opcional)
Elaboración:
1. Exprimimos el zumo del limón y reservamos.
2. En un bol amplio ponemos 400 gramos de yogur griego, 4 huevos, 100 gramos de azúcar y50 gramos de harina y mezclamos hasta obtener una masa homogénea. Se puede hacer perfectamente con una varilla manual y tardaremos sólo uno o dos minutos.
3. Añadimos la mitad de la levadura y unos dos tercios del zumo de limón que hayamos obtenido. Volvemos a mezclar y dejamos reposar.
4. En otro bol ponemos 200 gramos de yogur, 2 huevos, 25 gramos de azúcar, 50 gramos de harina y los 200 gramos de mermelada de cereza y mezclamos.
5. Añadimos el resto del zumo de limón y de levadura, volvemos a batir y dejamos reposar unos minutos.
6. En el molde que vayamos a utilizar para hornear nuestro pastel vamos echando cucharadas de ambas masas de manera aleatoria hasta quedarnos sin masa. Yo he utilizado dos cucharas de servir helados.
7. Podemos terminar de mezclar con la ayuda de un palillo para hacer dibujos en las masas.
8. Introducimos en el horno precalentado a 160ºC y horneamos durante unos 60 minutos aproximadamente o hasta que lo veamos cuajado.
9. Dejamos templar con la puerta del horno entreabierta.
10. Cuando esté completamente frío lo tapamos con film transparente y lo metemos en el frigorífico. Lo dejamos reposar varias horas, mejor toda la noche o de un día para otro.
Es una receta facilísima y espero que si aún no os habéis animado con el pastel turco de yogur lo hagáis con cualquiera de las dos versiones que os he compartido en las últimas semanas ¡os va a encantar!
Esta semana se me está haciendo particularmente larga y dura. La alergia no me está dando tregua y parezco un alma en pena con los ojos llorosos y la cara hinchada... ¡qué horror de primavera!
Lara por suerte parece no haber heredado mis alergias ¡y yo encantada! esto sería demasiado para un bebé tan pequeño. Aunque es pequeña de edad, que en cuanto a tamaño... ¡ya la habéis visto en Instagram! La niña crece que da gusto aunque llevamos un par de semanas bastante reacios a abrir la boca ¡lo que nos cuesta darle de comer!
No sé si serán los dientes, el verano o simplemente que nos hacemos mayores y echamos más carácter pero se me van las horas para darle la comida. Por contra va haciendo monerías propias de la edad y cada día me sorprende más porque aunque no habla (aparte de papá y mamá no dice nada) lo entiende absolutamente todo.
Esta semana se me está haciendo particularmente larga y dura. La alergia no me está dando tregua y parezco un alma en pena con los ojos llorosos y la cara hinchada... ¡qué horror de primavera!
Lara por suerte parece no haber heredado mis alergias ¡y yo encantada! esto sería demasiado para un bebé tan pequeño. Aunque es pequeña de edad, que en cuanto a tamaño... ¡ya la habéis visto en Instagram! La niña crece que da gusto aunque llevamos un par de semanas bastante reacios a abrir la boca ¡lo que nos cuesta darle de comer!
No sé si serán los dientes, el verano o simplemente que nos hacemos mayores y echamos más carácter pero se me van las horas para darle la comida. Por contra va haciendo monerías propias de la edad y cada día me sorprende más porque aunque no habla (aparte de papá y mamá no dice nada) lo entiende absolutamente todo.
Me despido esta semana de vosotros con un delicioso y fresquito trozo de pastel ¿verdad que os apetece?
Nos leemos la próxima semana ¡sed felices!
Manos a la masa y ¡bon appétit!
No comprendo tu temor a las adaptaciones de pasteles que haces, siempre te quedan de maravilla, con un aspecto y un sabor estupendo. Las ayudas a las madres de pequeñas han conseguido que tengamos unas manos ágiles en la cocina y resolvamos con acierto más de una receta. Menudo pastel has preparado más rico y apretado, con un colorido tan atractivo que dificilmente nadie se pueda resistir a probarlo. A pesar de la operación biquini.
ResponderEliminarUn beso.
Me encantan las cerezas y este pastel tiene que estar riquísimo, es muy original y te ha quedado preciosoooo. besitos guapa
ResponderEliminarA mi si me apetece ! de hecho mientras iba leyendo con mi té chai al lado ya estaba pensando en prepararlo ,la originalidad de cada una al poner y mover la masa es lo que deja el marmolado precioso ,el color te ha quedado monisimo(sera que me gusta el rosa) y seguro que de sabor delicioso
ResponderEliminarbesitos
Tiene que estar de vicio
ResponderEliminarHola Cuca!!
ResponderEliminarA leguas se ve que este pastel no es pesado y que debe de entrar que no veas!!!
Te voy a decir que mi madre no era así, nunca se preocupó en si aprendía a cocinar o no. De todas formas desde muy joven empecé a hacer recetas de revistas y libros,será por eso que se preocupaba poco jaja
Sobre la alergia mi hija va igual que tu y, resulta que solo desde hace un par de años le ha empezado a perjudicar, lo que son las cosas.. porque antes nunca había tenido.
Bueno guapa que pases un feliz fin de semana
Besos!!
Cuca, me ha parecido precioso, me recuerda a mi tarta de queso con 🍒 cerezas, aunque si ese "peaso marmoleado". Debe estar divina. Te recomiendo la mermelada de cerezas de La vieja fábrica, está buenísima. Compré la última vez que estuve en Gibraltar un aparatejo para deshuesar y va como una flecha, te lo digo porque no es muy difícil encontrarlo.
ResponderEliminarCon respecto a lo que dices del verano es exacto. Tal cual. Cuando vivía con mis padres tampoco me dejaban callejear, a las diez en casa... qué tiempos aquellos. En casa no se podía decir nada de: "me aburro" pues rápidamente preguntaban, ¿está ordenado tu armario? o el temido "ven, echa una mano". Amén de los modelitos veraniegos esos espantosos de flores y esos tirantes, esos pantalones cortos para ellos y ellas que se usan sin pudor ninguno, con esas lorzas que a veces nos gastamos.
Cuca, ayer le recordaba a mi marido que cuando los niños eran pequeños (3, 4 años), los llevaba a la playa por la tarde, merendaban en la playa y a la vuelta sobre las 7 iban al baño del tirón y, mientras estaban en el baño yo cerraba ya la ventana de las habitaciones y se quedaba aquello como la boca de un lobo, entonces rápido a cenar y a ver cuentos en la cama diciendo yo que ya era de noche y que había cole al día siguiente... ¿te imaginas a las 9 de la noche en Cádiz? Todo sol. Jajajaa
Qué lástima. Ahora, eran los más descansados de sus clases. Pobres...! No veas lo que nos reíamos ayer con este cuento. En todas las casa cuecen habas. Si Lara no quiere comer no creo que te tengas que preocupar demasiado, todos los niños tienen esas épocas. Hay que inventarse algo a medias con su pediatra y listo.
Besos grandes, preciosa, mejórate de tu alergia. Y ánimo con el puñetero verano y esas pintas.
Hola Cuca!! Me uno al club de las que piensa que el verano deberia de durar la mitad jajaja
ResponderEliminarEn tu entrada de hoy hay muchas cosas con las que coincido. Tampoco sabía cocinar , y lo mío tiene delito pues mi padre era cocinero y teníamos un restaurante, quizás por eso, por estar rodeada de profesionales, me sentía pequeñita y no me lancé hasta que me casé y tuve mi primer hijo.
También coincido con las alergias jajaja. He tenido los ojos irritados y cerrados del escozor, que parecían dos "puñalás" en un cartón jajajaja
Y por último decirte que vamos a coincidir con el pastel jejeje porque lo he anotado rápidamente y lo publicaré porque quiero probarlo ya ya ya!!!
Besotes!
Hola Cuca!! Se me ha quedado un sabor agridulce con tu entrada... El principio me ha deprimido un montón jaja! Llevo unos días fatal porque se va acercando el final del curso y con eso de que se hacen las tardes eternas Luca no para de decirme que se aburre y yo digo: "madre mía qué será cuando acabe las clases?!! Toooooooodo el día en casa!!?" 😱😱😱 Me has recordado lo que odio el verano y has resumido muy bien todo lo que me disgusta de el...
ResponderEliminarEn fin, menos mal que está tu pastel turco para animar a una jaja!! Y es muy de princesa también como mi limonada jeje! Es verdad que parece más tarta de queso que bizcocho así a primera vista por eso tiene que sorprender bastante al hincarle el diente! Qué alegría me daría poder hacerlo jeje!! Y luego con ese sabor a cereza tiene que ser una pasada!! Te ha quedado genial!
Cuidate esa alergia y un besote para Lara (con el calor el apetito de Luca también disminuye...) Besitos!!
Cuca te ha quedado una tarta preciosa y seguro que está bien rica, está bien enfrentarnos a nuestros miedos culinarios y superarlos.
ResponderEliminarA mí me pasa justo lo contrario que a ti, echo de menos los veranos de cuando era estudiante, con todo el tiempo por delante para hacer lo que quisiera, ¡en mi caso se me pasaban volando!
En lo que sí que coincido es en lo de la cocina, mi madre me intentó enseñar muchas veces y a mí lo de cocinar no me interesaba lo más mínimo, hasta que no me independicé no me empezó a entrar el gusanillo de la cocina. ¡Míranos ahora! ¡Quién lo diría!
Un besazo y feliz ya casi fin de semana.
Cuca buen día!!! Te leo y me retrato un poco en aquello de los tiempos de vacaciones y mamá dando las cantaletas que todas las madres nos dan, que en lugar de ayudar con oficios varios de casa, prefería mil veces meterme en la cocina. Se ve que el verano ya llegó con su larga claridad... Y yo como siempre feliz de leerte tus recetas de pasteles de yogur y también los de queso, y tantas delicias que tienes debo decirlo (hoy me repito de nuevo pastel de pan viejo, porque lo amé, tal como lo haces y aprovecho muy bien todas las puntas de las hogazas que van quedando). Este mes en mi casa pinta de coma diabético O_O entre cumpleaños de mi media costilla, más otras recetas!!!... pero te digo que tengo que encontrar el momento de hacer un pastel como esta versión, en cuanto a las cerezas tristemente por acá son imposibles, y tan bonitas que son, pero tendré que hacerlo con moras que esas llegan entre julio y agosto por estas latitudes, creo que saldrá bien con ellas; porque tampoco e intentado hacer marmolados y te digo que este tuyo se ve estupendo, un marmolado precioso, me gusta mucho, el yogur y el queso combinan tan rico. El acido que aporta y la textura en sí es deliciosa, así que yo feliz de visitarte, de imaginarte en cada historia que nos cuentas y de identificarme en tantas cosas.
ResponderEliminarTe mando un beso, espero te mejores de las alergias y seguiré disfrutando de ver a la pequeña Lara, tan encantadora. Muchos besos querida Cuca y que tengas un lindo fin de semana.
Que bonito Cuca.
ResponderEliminarY el corte súper lindo, me encanta ver los cortes :-))
Un saludito
Ja, ja, eso de si te aburres coge el trapo y limpia a mi también me lo decían y no me quedaba de otra. Y en invierno, mi madre pensó dejar para los sábados la limpieza de la casa y me tocaba limpiar el comedor todo enterito, para mi sola con diez años. Y encima me reñía porque dice que no levantaba las figuras del mueble y dejaba el cerco de polvo (cosa que era cierta). Y yo a la cocina si que no entraba ni para pelar patatas. No empecé a cocinar hasta que me casé, va a hacer pronto seis años. Y bueno, tampoco es que sepa mucho aún, pero ahí vamos, poco a poco, je, je.
ResponderEliminarMe encantan los pasteles marmolados, y no sé porqué no te has atrevido antes a hacerlos, pienso que precisamente, en su imperfección está la atracción de estos pasteles. Además, con ese color rosita que te ha quedado, ¡¡es precioso!! Y la puesta en escena que le has hecho a este pastel también me gusta mucho, ¡¡me encanta!!
Me gusta también el aspecto suave del pastel, de esos que dices que un pastel tan fino y de yogur no puede tener calorías, estos son mis pasteles favoritos, sobre todo ahora que va apretando el calor. Da igual que haya sido horneado y haga un calor de miedo, lo bueno es que cuando te lo comes, te resulta fresco y delicioso. ¡¡Es una pasada de pastel!!
Espero que poco a poco la dichosa alergia se vaya pasando, mi marido también está un poco con esos efectos, menos mal que a él siempre le da flojito, porque es muy mal enfermo, ja, ja.
Y ya vi en Instagram el otro día lo guapa que está Lara, en esa foto con la fuente, ¡¡qué bonita está!! Así que esperate que hable, que ya te la comes del todo. Besitos.
Para ser el primero te quedo estupendo , besitos
ResponderEliminarCuca querida, siento no haber podido venir por tu cocina en dos semanas... pero no sabes lo liadísima que estoy... se me han venido encima varios asuntos que van para largo y que van a ocupar la mayor parte de mi tiempo, así que no podré visitar vuestras cocinas tanto como quisiera...
ResponderEliminarPero esta tarde, al ver tu publicación de hoy, me he venido en seguida porque, si ya me gustó tu pastel turco de yogur... éste es ESPECTACULAR, con esos colores tan veraniegos y tan apetitosos.
Adoro los cerezas, y aún no las he comprado esta temporada... a ver si las veo buenas, porque como dices, creo que la cosecha no está siendo muy vistosas este año...
Con respecto a las "frasecitas" de las madres, yo también me las conozco a mi me decía la mía... "si estás aburrida: coge la burra y echa un viaje..." (jajaja!) o aquella otra de: "si estás aburrida échate en agua.." (jajaja!) en fin, y otra muchas que ahora no recuerdo... cada madre tiene sus frases y a nosotras no nos gustaban, a que sí?
Te mando un gran abrazo y un beso para Lara y parta ti y me llevo un riquísimo y dulce sabor de boca con tu pastel fresco y apetecible, ideal para este tiempo... hasta pronto!!!
Es espectacular entrar en tu blog y encontrar estas maravillas.
ResponderEliminarUna receta muy buena me encanta que bien se ve las fotos.
Hola Cuca. Si eres chica y de según qué época, tocaba limpiar y limpiar. Nosotras éramos 4 y los sábados tocaba limpieza sí o sí y siempre estaba la o las que se escaqueaban. La frase de mi madre era: "Tenéis que aprender, por si alguna vez lo tenéis que mandar" y la verdad, es muy cierta y a mí, me ha servido bastante, aunque, en realidad, no siempre funciona, porque a mí, siempre me gusta, hacerlo yo y cuando la confianza mata, todo cambia. Me parece que me entiendes.
ResponderEliminarYo lo de la cocina, lo llevé siempre bien, porque soy la única de las hijas de mi madre, a la que le gusta y ha rescatado recetas antiguas.
Tu pastel turco ya me gustó mucho y ahora, este marmoleado tan bonito, aunque sea, por suerte, te ha quedado precioso y menudo sabor tiene que tener.
Hace mil años que hice un bizcocho marmoleado y nunca más repetí. Ya tocaría.
Recuerda esta entrada, porque te veo soltando frases semejantes, en cuanto te descuides. Eso también es señal de ser una buena madre. Yo tengo chico y no paro, pero hace caso de lo que quiere.
Muchos besos y cuídate mucho, que con el calor, te quedan muchos días largos.
Y te leo..y es que me viene mi madre también...."si estáis tan aburridas, ven aquí a rebozar la merluza"....o plachar pañuelos....buf...si es que al final, donde mejor estábamos era en el cole
ResponderEliminarEl pastel amarmolado te ha salido impresionante reina
Besos guapa
Marialuisa
Cuca aunque las retahílas de mi madre aún resuenen en mis oídos, literalmente, porque sigue dando más ordenes que un sargento, a pesar de la edad, jajaja. Yo nunca he dicho "me aburro", siempre he sido una mente activa, y mis manos volaban haciendo cosas que me gustaban, los veranos especialmente, sobre todo a la hora de la siesta, que yo nunca he dormido en mi vida, mis hermanas si la echaban, pero yo me subía a la azotea los días menos calurosos, y los de más calor me tiraba las tardes en una manta amarilla (que aún conservamos en casa de mi madre) y me ponía a jugar con las muñecas recortables, le hacía casas con cajas de zapatos y los muebles con cajas de cerillas, las forraba con papeles de colores, algo así a lo que hace Esther en su blog de manualidades, además de por supuesto leer, que nunca me cansaba, mi madre me tenía que llamar mil veces para que subiera a comer, y en cuanto terminaba ya tenía de nuevo algo entre manos, y los días de piscina eran fantásticos, ahora que vivimos en la casa que entonces era de vacaciones, no la utilizamos tanto a pesar de tenerla llena durante todo el año.
ResponderEliminarPor eso a mí que me den veranos todo lo largos que quieran, aunque me encantan el resto de estaciones, no tengo problemas de adaptación, jajaja.
Y para ponerle la guinda al pastel, este mes es mi cumple así que toca pensar en algo dulce, rico y sencillo como este.
Besos
Hola Cuca. Hay que reconocer que el verano tiene sus pros y su contras. A mí en concreto me gusta aunque te diré que al final ya cansa pero al principio supongo que será por el cambio de rutina, los días aunque parezcan más largos por la luz, siguen teniendo 24 horas jj, se toman con mucha ilusión. Ahora te asomas a la ventana y ves coches y personas, en verano te asomas a la terraza y ves el mar, la playa, la piscina y solo eso hace que los días parezcan mejores jj.
ResponderEliminarLos tiempos han cambiado y cuando he leído que te aburrías he recordado que cuando yo era joven, de eso ya ni te cuento jj, entonces no había cambio de hora, lo pasaba en grande ya que desde que me levantaba y después de desayunar ya comenzaba la actividad y es que los veranos los pasábamos en el pueblo de mi padre, nos íbamos al acabar las clases y regresábamos pasadas las fiestas que eran a mitad de septiembre, duraban 4 días y al finalizar también era el fin del verano y el comienzo de clases. Nunca me aburrí.
Ya me habría gustado que mi madre cuando cocinaba me hubiera dicho, ¡vente aquí y échame una mano! ahora estoy seguro sería tan buen cocinero como lo eres tú jj porque aunque no te gustara al final algo se te quedó de las indicaciones de tu madre y si no ya me dirás jj.
Me pregunto como puedes tener reparos en preparar cualquier cosa si todo lo que haces lo bordas. Y este pastel lo refleja. dices que nunca te atreviste por miedo a que saliera mal y ya ves, has conseguido un pastel espectacular, nadie diría que es el primero que has hecho de este tipo, ¡ves! nada se te resiste.
No dudo de que debe tener un sabor exquisito y que la mermelada le habrá dado un toque sensacional
A mí aunque haga 40ºC no me importa encender el horno jj, aunque se pase calor el resultado final merece la pena. Y prueba de ello es este delicioso pastel que nos ofreces. Verlo y apetecer probarlo es todo lo mismo.
Que no pases mucho calor, que te mejores de tus alergias y que Lara siga creciendo y haciéndose cada día más guapa.
Un abrazo.
Se ve exquisito este pastel!
ResponderEliminarNiña, tu marmolea lo que quieras porque este pastel te ha salido bordado!
ResponderEliminarYo tampoco sabía cocinar de joven, me daba calambre entrar en la cocina más que para prepararme espaguetis para la cena o incluso a las dos de la madrugada, jajaja. Era experta en abrir latas y poco más, pero la vida te cambia, por suerte, y descubrir el placer de cocinar es de lo mejor que me pasó hace ya muchos años, eso si, jajaja.
Un beso grande y que disfrutes del verano si puedes... mejor unirse al enemigo porque total no nos vamos a librar.
Te estaba leyendo y me estaba viendo a mi ,mi madre simpre me tenia ocupada en verano ,aprendi a ganchillar ,hacer punto de cruz asi como con 17 años me tuvo un verano con una modista para aprender a coser y pese a que a de aquella yo renegaba e iba de mala gana me ha venido de perlas pues he echo muchas cosas en mi casa asi como ropa para mi ademas de los arreglos de bajos de pantalones ,encambio si podia estar en la cocina no protestaba jajaja a mi siempre me gsuto cocinar y mi madre me dejaba hacerlo pocas veces decia que manchaba mas que hacia jajaja y eso que siempre me gusto ir lavando y tener la cocina recogida,eso mismo dice de mi hermano o mi sobrina si algun dia se ponen a cocinar en casa yo creo que lo dice por que quiere cocinar ella solo .
ResponderEliminarA mi no me importa que los dias sean largos es mas me gustaria que lo fuesen mas si te contara todo lo que hago yo despues de venir de trabajar jajaja .
Bueno ahora si que si voy a hablar del pastel turco marmolado que has echo uummmmmmmmmm como tiene que estar ,ya me he guardado la receta en pendientes hace una semana he echo mermelada de cerezas asi que en cuanto pueda lo hare palabrica.
Te ha quedado de relujo no lo siguiente.
Bicos mil y feliz fin de semana wapa.
Cuca, hoy he disfrutado mucho leyendote, pues tambien me hiciste recordar las cantaletas de mi madre... ups y creo que ahora yo las estoy haciendo con mi hija, a sus 8 años... Pero si vieras tambien como las recuerdo con cariño? Porque estando lejos la extraño todos los dias, aunque la vea por Skype, no lo puedo evitar. Al contrario que tu, estoy feliz de que este llegando el Verano. Cierto es que le quedan pocos dias de escuela a mija y luego tengo que ver en que actividades la pongo y que me ideo de manualidades y cosas para que no este sin hacer nada, lo cual me quita mucho tiempo. Pero aca los Inviernos son tan pero tan largos, que te prometo que yo feliz como lombriz! Mi alma necesita de calorcito, yo no soy de frios!! Tu tarta, aunque bien es cierto que ahora ya no se antoja prender el horno, es toda una delicia y con una fruta que me fascina! Vale la pena la deshuesada de las cerezas ante todo lo que se puede hacer con ellas!
ResponderEliminarBs!
Pues yo creo que ninguna nos hemos librado de las retalías de nuestras madres...jajaja, casi siempre por las mismas cosas, aunque he de decir que yo nunca me he aburrido, ni antes , ni ahora, todo lo contrario, me falta tiempo para hacer todo lo que me gusta!!
ResponderEliminarMe encanta tu pastel, los marmolados me gustan mucho quedan muy atractivos!! Bs.
Hola guapísima !!!
ResponderEliminarAyy, las cantinelas de las madres, lo malo es que con el tiempo son repetitivas y las tenemos grabadas en el subconsciente y a menos que tngas cuidado, te salen igualitas a las de ellas y con el mismo tono. La que me solían decir siempre, era: ..pues ordena tu cuarto jajaja Pero vamos, no es que me aburriese porque no paraba quieta.
Oye, el pastel es delicioso, si es que donde haya cerezas hay alegrías, cómo me gustan.
Aunque por aquí están todavía bastante caras y estoy esperando a que bajen para comprar y hacer postres y mermelada.
Siento que el calor apriete de esa forma, creo que así tampoco me gustaría el verano.
Besotes gordos mi niña y otro para nuestra Lara, que ya es patrimonio de las amigas blogueras de mamá.
Feliz fin de semana.
Cuca hace unos dias hice mermelada de cerezas asi que no me queda mas que hacer tu rica tarta, me ha encantado, bsss
ResponderEliminarQue rico Cuca !! me encantan la cerezas y este si tengo tiempo te lo copio, que me mandaron cerezas y si no me las acaba mi costilo.. que cada vez que abre la nevera coge un puñao, lo hago.
ResponderEliminarTe ha quedado precioso.
Mi madre igual que la tuya jajjajajajcreo que todas son iguales.
Besinos
El toque de Belén
Qué buena pinta tiene, seguro que está delicioso.... Besos
ResponderEliminarHola! Tiene una pinta buenísima, nosotras dejaremos el pastel para cuando vuelva el fresquito y mientras eso si, haremos mermelada en conserva. Esperamos que te mejores con la alergia. Besis
ResponderEliminarMadre del amor hermoso Cuca, lo que daría por comerme ahora mismo una porción de este pastel, mmmmm!! Fíjate que no te veo yo con miedo ante nada relacionado con la cocina, el marmolado no podía ser que te quedara de otra forma.... una auténtica maravilla para la vista y no me cabe duda que un placer para el paladar!! ´
ResponderEliminarSe me han ido los ojillos a ese rollito de arpillera con puntilla, yo también tengo alguno de colores, sabes... me parece ideal para decorar una caja de fresas, jiji, ojala te animes en vacaciones a terminarla!
Como siempre, me siento muy identificada con las anécdotas que cuentas de la niñez-juventud, me alegro que aquellos veranos echando una mano en la cocina al final fueran tan productivos... la de vueltas que da la vida...
Un beso muy fuerte!
Umm que hambre me esta entrando que pintaza!!besos
ResponderEliminarCuca, me encanta como te ha quedado la superficie, con el marmolado de cerezas como adorna la tarta. Le decía el otro día a Patty que he estado viendo muchas tartas por la blogosfera estos días, y yo que todavía no me atrevo a hacer una; a ver si me pongo a eso.
ResponderEliminarPor cierto esta semana encontré unas cerecitas a buen precio, pero no pienso hacer nada con ellas, voy a comerlas crudas; lo que me parece un rollazo es sacar las semillas; si encuentro unas mas y quisiera hacer algo, primero me busco un truco para deshuesarlas rápidamente, jaja!
Y las cantaletas de tu mamá parecen que son las mismas de todas las mamás del planeta; eso de decir, estoy aburrida y que te lancen la propuesta pues ponte a limpiar o hacer algo...jaja me la conozco. Mi mamá no dejaba que entrara a la cocina, ese era como su territorio.
Bueno amiga, cada día que pasa del verano, es un día mas cerca al otoño...Besitos y a la bella Lara. Feliz fin de semana!
el pastel me parece estupendo¡¡¡ se ve bien rico.
ResponderEliminarMi madre parecida a la tuya, jaja
yo como soy del norte el verano me gustaría que durase mas.
besos crisylaura
Me parece que te quedó un marmolado muy bonito y seguro que con la mermelada de cerezas le tiene que dar un toque muy rico.
ResponderEliminarBesitos
Que rico pastel turco Cuca, y con un marmoleado divino, te ha quedado estupendo.
ResponderEliminarBesitos.
Hola , qué bien que te ha quedado, me estas dando una idea estupenda para aprovechar la mermelada de cerezas casera que hice para mi sacher, me sobró y antes de que se la zampen toda haré tu estupendo pastel, besos guapa.
ResponderEliminarHola Cuca¡¡
ResponderEliminarCon respecto a este tiempo y a los días, soy como tu, yo también tengo ganas de que empiecen a acortar, jeej, pues no nos queda nada todavía, acabamos de empezar.
Ay, esas fracesitas están escrita en las instrucciones de madre, jeje, yo me he visto alguna vez soltandoselas a mi hija, cada día me parezco más a mi madre en eso, jeje, ya te tocará, repetirás lo vivido por ti, jeje, yo le decía a mi madre que cuando tuviera una hija no iba a ser tan machacona, jeje, vaya si lo soy.
Que te voy a decir de este pastel, se ve increíble, yo como lo de la operación bikini la tengo olvidada desde ya te digo que me apuntaría aun trozo ahora mismo, tiene que estar riquísima.
Veo a tu peque en las fotos y esta preciosa, como le cunde crecer.
Besos.
¿Cómo decirte que no me apetece? ¡Pues está claro que sí! Siempre me han llamado la atención estos marmoleados en los bizcochos y otros postres pues quedan bonitos y finos. A mi no me surgen dudas sobre vuestras habilidades porque valéis mucho y todo lo sacáis adelante sin problemas, es un lujo teneros de amigos.
ResponderEliminarYo hornearé cuando tenga deseos de hacerlo, ya lo he hecho otros años, salvo que el calor sea aún más grande que el de estos últimos años, espero que no por el bien de todos.
Besitos y enhorabuena por tu delicioso pastel.
Que pinta mas rica tiene esta tarta, y te quedó preciosa.
ResponderEliminarMe muero por un trocito... umhh!!!
Un besito :)
Que pinta tan fantástica tiene este pastel. Me ha encantado.
ResponderEliminarSaludos
¡¡¡Lo has bordado Cuca!!! Desde luego te estás desquitando a lo grande de esos años de poco amor por la cocina y nos sabes deleitar con delicias tan ricas como este pastel marmolado. Ha salido un pastel muy vistoso y con un veteado superllamativo que se me hace irresistible. Yo sí voy a guardar la receta para hacerla en mi/tu época favorita. Tampoco en casa descansa el horno en verano, la verdad es que somos muy de hacer recetas de horno y lo amortizamos con creces.
ResponderEliminarRespecto a los días de verano, ¡son interminables! Me da cosa cuando mi hija me da las buenas noches y se va a su habitación a las 10 de la ¿noche?
Firmé una petición que hay en Change.org para recoger firmas y lograr que nos adaptamos a nuestro verdadero horario, no tiene ningún sentido esta cabezonería en seguir con un horario que nos fue impuesto sin ningún tipo de razonamiento. Bueno, ya queda menos para nuestro amado otoño...
Un beso y enamorado quedo de este exquisito y coqueto pastel.
¡Mil besos!
Te ha quedado pero que muy bien y muy vistoso. Segurísimo que está delicioso pues salta a la vista. Buen finde Cuca y un beso.
ResponderEliminarte ha quedado preciosísima! Me parece de lo más original... Con lo que me gusta la mermelada de cerezas...
ResponderEliminarTe ha quedado de lujo!!
ResponderEliminarCuca se ve de vicio!!! Como para no probar un par de trozos!! Muak :)
ResponderEliminarHola Cuca
ResponderEliminarQué gustazo leerte. Descubrir que en muchas cosas coincido contigo, en otras no tanto, pero ya se sabe que no hay dos personas iguales ^-^
Decirte que a mí me encanta el verano, aunque claro, aquí en el norte las temperaturas en esta época del año non son tan extremas. Lo mismo las horas de luz. Si por mí fuera sería siempre de día. Odio esas noches eternas de pleno invierno.
En cuanto a las anécdotas en la cocina con tu madre, ya quisiera yo vivir algo parecido con la mía. Lo digo porque mi madre odiaba cocinar. Ella cocinaba por pura obligación, y el recetario era más bien escaso ^-^ Luego cuando crecí fui yo quien le enseñó a ella. Fíjate qué cosa!!! Pero bueno cocinar no sabía mucho, pero era y es la mejor madre que una puede soñar. La quiero con locura!!!
De tus problemas con la alergia, te entiendo mejor que nadie. Este año para mí está siendo especialmente difícil en ese aspecto... cinco años vacunándome cada mes, tomando antihistamínicos a diario, y ni con esas... paciencia, es lo que queda!!!
Cuca, tienes que perder esos temores en la cocina. Lo que los demás pueden hacer, tú con más motivo, porque en artes culinarias eres experta, no hay más que echarle un vistazo al blog.
Un beso muy grande guapa. Y otro oara Lara
Por cierto, se me olvidó decirte, el pastel tiene una pinta inmejorable, y el efecto marmolado te ha quedado perfecto.
ResponderEliminarBss
Hola Cuca. Qué maravilla de pastel, rico y precioso como todos los que haces. Ya falta poco para que empiecen a acortar los días ( 21 de Junio ) A mi siempre me ha encantado el verano,tengo los mejores recuerdos. Especialmente de los días de playa y la casa llena de primos y tios. Ahora el verano me agota pero igual que antes sigo disfrutando de la familia.
ResponderEliminarBesos, Carmina.
Esto no es una tarta, es una obra de arte. Me imagino los sabores y texturas en la boca, es tocar el cielo, un beset
ResponderEliminarCuca, está claro que el verano está a la vuelta de la esquina con todas sus consecuencias, una de ella el calor. A mí los días largos me gustan, en verano siempre falta tiempo para hacer cosas.
ResponderEliminarYa veo que tu madre te animaba a distraerte incluso con un poco de chantaje emocional jajaja con lo de no saber ni freír un huevo jajaja
En cuanto al pastel decirte que para un goloso como yo es toda una tentación y el corte se ve muy chulo
Abrazos y buena semana!!
A mi lo único que me gusta del verano es que cuando salgo de la tienda a las 8 sigue habiendo casi dos horas de luz así que me da la sensación que puedo hacer más cosas y que no he perdido el día trabajando jajajajajaj
ResponderEliminarMe ha encantado el pastel, tengo un tarro de mermelada dando vueltas por la nevera así que seguro que lo hago esta semana. Es mejor guardarlo en la nevera en caso de que sobre algo?
Espero que estes mejor de las alergias :)
¡Por supuesto! Todo lo que sobre abierto mejor a la nevera ¡especialmente en verano!
Eliminar¡Besos mil!
Ay Cuca, yo estoy como tu, que los días sean mas chicos ya.
ResponderEliminarJajajaja, todas las madres, me voy a incluir ya yo, decimos lo mismo,jajaja.
Ya mi mayor no tiene que ir a la universidad, hasta el día 22, así que ayer se puso a arreglar su mesa y un baúl que tiene con juguetes y cosas, pero hoy ya le he dicho, que ya que esta en casa que vaya haciendo, cosas, y la cara que puso, fue un poema,jjjjja como diciendo ya empezamos.
Este pastel tiene una pinta deliciosa, la verdad que este año la fruta esta cara y regular, sobre todo en las primeras de la temporada. Bsss
Hola querida, llego tarde par comerme esa porción que me ofreces, pero bueno no me enfado es culpa mía por llegar tan tarde!!
ResponderEliminarTendrías que ver mi cara cuando te leía, lo que te decía tu madre era como si yo lo estuviera viviendo, me ocurrió lo mismo.
Me encanta este pastel marmoleado, bueno todo lo marmoleado me encanta, seguro que esta riquísimo y que sepas que te ha quedado genial!!
Un besito a mis princesas
Llego tarde para probar este pastel, menuda pinta tiene más buena!!!.
ResponderEliminarBesitos guapa
sólo voy a decir una cosa: me das un trozo?? jajaja porfaaaa. PInta diez, y marmoleaste muy bien ;). Ánimo con el calor, aprovecha la noche para hornear, aquí en el norte aún no tenemos ese problema pero ya lo tendremos, porque en pleno verano es difícil también encender el aparato jjjj. Un beso fuerteee
ResponderEliminar¡Exacto! La noche es perfecta para hornear porque mientras duermo se enfría la cocina.
EliminarTambién lo hago a primera hora, muy temprano, aunque tiene el inconveniente de que cuesta más bajar la temperatura de la cocina a lo largo del día.
¡Y por supuesto que te doy un trozo!
¡Besos mil!
Ayyy las madres que incomprendidas son. Sólo las entendemos, cuando nosotras acabamos siendo madres (y repitiendo los mismos roles). Sí también yo escuché lo mismo que tú: "si te aburres, ven a ayudarme" o peor todavía: "pues coge los libros y estudia un poco" (daba igual que fuera invierno que verano para estudiar...). Cuando yo me vi, diciendole las mismas cosas a mis hijos, comprendí a mi madre... En fín. La tarta la calvaste hija. El marmolado no tiene misterios y siempre sale, y a la vista está. No hay que tener miedo, porque en cocina, no hay grandes dificultades, más bien, paciencia. Animo con los días largos. Yo que ya no tengo hijos pequeñitos y que se valen por sí solos, me encantan, pero te entiendo perfectamente....
ResponderEliminarUn besín,.
Cuca, sin lugar a dudas tu pastel turco marmolado ha quedado encantador con el aporte de la mermelada que se confunde con el yogur. Me parece una receta hermosa por lo vistosa, pero, además, perfecta para un final de comida o para convidar en una reunión. Aquí, está llegando el invierno con mucha prisa y encender el horno es, más bien, una alegría. Por eso, y porque las cheesecakes en cualquiera de sus versiones (con queso solo, queso y yogur, ricota/requesón…) me encantan, tu receta me parece perfecta para preparar en cualquier momento. ¡Preciosa y sabrosa! ¿Qué más se puede pedir? Espero que mejores de tu alergia (por aquí tenemos las propias del otoño, más resfríos y toses del invierno por adelantado que venimos sufriendo). Cuidate mucho.
ResponderEliminarBesos enormes.
¡Ja, ja, ja...! Cómo me he reído al leer tu experiencia veraniega cuando vivías con tu madre. Sin lugar a dudas, reconozco que me recuerdas a la mía. El aburrimiento se te quitaba a base de trabajo en la casa. La mía aprovechaba las fechas vacacionales (verano o invierno) para que yo me pusiera a hacer limpiezas a fondo de determinadas habitaciones (su cuarto y parte del salón eran intocables, esos los hacía ella; los baños, cocina, estudio y mi cuarto me tocaban a mí).
ResponderEliminarEste pastel turco marmolado que has cocinado tiene una pinta de lo más estupenda y apetecible. Dan ganas de pegarle un bocado a la pantalla del ordenador.
Un besazo enorme, guapa.
Hola Cuca, qué bonito y bueno es tu pastel. Por fuera me encanta como queda presentado y por dentro el corte también, se ve buenísimo. Yo estoy con ganas de que ya vayamos cuenta atrás acortando los días, el verano me agobia un poco, o un poco más que poco... jeje. Muchos besos!
ResponderEliminarHola Cuca! El pastel se ve delicioso y aunque haya que hornearlo después... merece la pena tomarlo bien fresquito de la nevera y se agradece... me parece delicioso...
ResponderEliminarA mi tampoco me gustan las calores... mi menos la luz... mi madre me dice que si soy una vampira... porque es lo que peor llevo jaja.. con lo fresquitas que iríamos a comprar en verano por la noche si no cambiaran el reloj jaja... Besos
Yo adoro el verano Cuca, los días largos, la luz a todas horas, los niños en la calle y la gente en las terrazas.
ResponderEliminarEn verano todo es más alegre y más bonito. Y el calor, pues es un mal menor. Seguro que con esa rica tarta de yogur y cerezas se sobrellevar mucho mejor.
Besitos